[dropcap]H[/dropcap]ace apenas unos años mucho de lo que hacíamos se desvanecía en el olvido. Pero gracias al avance de la tecnología, en especial de las redes sociales, nuestra memoria está al alcance de más personas de la que creemos.
Tu reputación online es la construcción de una imagen social alrededor de la credibilidad, fiabilidad, moralidad y coherencia que los demás tienen de ti. Esta reputación sólo es parcialmente controlable, ya que se crea a partir de nuestras intervenciones en el mundo online y de las percepciones de nuestra audiencia.
Tu reputación se mantiene en niveles positivos si públicas y compartes de manera natural, objetiva y coherente con lo que quieres proyectar profesionalmente. Lo recomendable es ser muy cuidadoso con nuestros actos online, incluso offline porque ya todo lo que hacemos esta susceptible a ser proyectado en el entorno digital, pudiendo esto en algunos casos convertirse rápidamente en crisis.
Toda marca personal debe tener unos principios alrededor de los cuales giran el resto de elementos, unos valores que deben estar en consonancia a las exigencias de su profesión.
Si quieres posicionarte como experto puedes crear un blog personal en el que escribas el contenido que quieres dar a conocer, actualízalo con frecuencia ya sea con contenido propio o externo proporcionando la fuente.
La creación de una marca personal en la red y una buena reputación online no es algo de un momento, es una carrera de fondo que debemos trabajar cada día. Las actualizaciones de nuestros perfiles en redes sociales y la creación de contenido online en el blog personal debe realizarse con regularidad, para construir poco a poco la imagen online que queremos dar.
La reputación online no es un aspecto que podemos controlar 100%, pero nos permite saber la evolución de nuestra marca personal, nuestra influencia en el campo profesional y la receptividad de nuestro contenido.
Para monitorizar tu reputación online es recomendable realizar una buena búsqueda tanto en Google como en todos los motores de búsqueda; puedes buscar a través de tu nombre, de tu sobrenombre, tu nombre de soltera, tu correo electrónico, un nombre de usuario que utilizas con frecuencia o un número de teléfono y verifica que se dice de ti. De manera preventiva puedes robustecer tus ajustes de privacidad y configurar alertas en Google “Google Alert”.
El realizar todos estos pasos no nos garantiza estar libres de una posible crisis de reputación online, ya que no siempre está a nuestro alcance detectarla a tiempo, por lo tanto crea un plan de crisis donde expongas las líneas básicas de actuación gestionándola de manera coherente.
La mejor estrategia para mantener tu reputación online positiva es tomar una aproximación proactiva. En vez de intentar enterrar el pasado, enfócate en construir tu futuro. Al añadir nuevo contenido en la forma de nuevas cuentas en redes sociales, publicaciones en blogs, artículos y publicaciones en foros, podrás robustecer tu identidad profesional y quitarle importancia a tu pasado en Internet.