De acuerdo con la Comisión Latinoamericana de Empresarios del Combustible (Claec), República Dominicana es el segundo país de Latinoamérica con cargos más elevados en las tarjetas de crédito por consumos de combustibles, sólo superado por Brasil.
La Claec explicó que los cargos se sitúan en 2%, y solicitó al Gobierno dominicano su intervención para que se reduzcan a 0.5%.
Tras finalizar la sexagésima Cumbre de Detallistas de Combustibles, celebrada en Punta Cana, el presidente de la Asociación Nacional de Detallistas de Gasolina (Anadegas), Juan Matos, afirmó que si se disminuyen estos impuestos, la rentabilidad volvería a las estaciones de combustible. Con esto, “el sector de detallistas puede seguir subsistiendo y así no desparecen estaciones por el tema de la poca rentabilidad”.
Subsidio a combustibles
Matos pidió al Estado que los subsidios a los transportistas se hagan a través de una tarjeta de bono diésel, lo cual permitiría no sólo control por parte de las autoridades, sino que la ayuda llegaría a directamente a los choferes.
“En los próximos días iniciaremos en todo el territorio dominicano, un proceso de lucha para eficientizar nuestra rentabilidad y reclamar la reducción de la tarjeta de crédito, también que el subsidio al transporte sea mediante una tarjeta de bono diésel”, anunció.
De su lado, el representante de Uruguay, Federico de Castro, sostuvo que ni su país ni República Dominicana cuentan con una ley que establezca aranceles o comisiones mínimas a los comercios de combustible. A esta lista se añaden El Salvador, Guatemala, México y Colombia.
Sin embargo, De Castro señaló que en naciones como Argentina y Honduras, hay una ley que fija arancel máximo a los comercios, aunque no regula aranceles específicos para las estaciones de servicio.