[dropcap]L[/dropcap]a presencia de República Dominicana en el medallero de los recién concluidos Juegos Olímpicos Río 2016, celebrados en Brasil, no fue la más exitosa, si se compara con la de 2008 y 2012, en Pekín y Londres, respectivamente, por el lugar que ocupó el país al finalizar dichas competencias.
La única medalla, obtenida de las piernas del taekwondista Luisto Pie, hizo que el país quedara por encima de Guatemala, Honduras, Haití, Nicaragua y Panamá. Sin embargo, Jamaica, Cuba y Puerto Rico fueron los más destacados por la región caribeña.
Pero la baja participación en el medallero de la delegación dominicana, integrada por 29 atletas de 11 disciplinas, puede tener su justificación en la asignación presupuestaria al Ministerio de Deportes y la distribución que éste hace a las federaciones y a los deportistas de alto rendimiento.
Desde el 2012 hasta el 2016 el presupuesto de Deportes solo se ha incrementado en 16.4%, al pasar de RD$2,032.2 millones a RD$2,366.4, que divido entre los cinco años equivale a un aumento interanual solo de 3.28%. Pero de 2014 a 2015 la asignación se redujo 0.50%.
Las estadísticas de la institución revelan una reducción en los recursos destinados a los programas de deportes de alto rendimiento y al de asistencia técnica y logística al deporte federado.
De acuerdo a memorias de la entidad, para el programa de asistencia técnica y logística al deporte federado y de alto rendimiento se destinaron en 2014 RD$811.5 millones, de los cuales RD$595 millones fue a subvenciones y aportes a las federaciones y RD$216.4 a deportistas de alto rendimiento.
No obstante, para el mismo programa, pero en 2015, solo se destinaron RD$86.9 millones, significando una reducción de 89.2%, aunque para este mismo período se redujo a 96.7% la cantidad de atletas de alto rendimiento beneficiados, al pasar de 13,956 en 2014 a 452.
Para este año, en el cual los atletas de alto rendimiento debieron prepararse para la competencia internacional más importante, el Ministerio destinó RD$249.3 millones, 186% más que en 2015.
Sin embargo, el año pasado se destinó más recursos a asociaciones sin fines de lucro y partidos políticos que a los atletas de alto rendimiento, transfiriéndose a dichas entidades de RD$476.7 millones, RD$389.8 millones más que a los deportistas.
El cronista deportivo, José Luis Mendoza, considera que aunque los recursos económicos son vital y clave, en cuanto a cantidad, es más importante la eficiencia con la que se invierten y entiende que las actuales cifras de inversión estatal al deporte “hace rato colapsaron”.
“Con el paso del tiempo, con el crecimiento, tanto de lo que recauda el Estado, de su presupuesto, la inflación, el incremento de los costos de entrenadores, de la nutrición de los atletas (de alto rendimiento), más la medicina deportiva, que es bastante cara y necesaria, todo eso se ha encarecido y el presupuesto se ha quedado igual”, explica.
Mendoza indica que el país ha podido subsistir en algunas disciplinas y clasificar 29 atletas a Río 2016, la delegación más numerosa sin deportes de conjunto, gracias al sector privado, específicamente a entidades como Creando Sueños Olímpicos (Creso), la cual es conformada por nueve empresas: Central Romana Corporation, INICIA, Ferquido, Claro, Banco Popular, Rica, Universal, Grupo SID y V-Energy.
“El deporte como fin recreativo tiene un costo. Hacer una cancha, un estadio de béisbol, adecuar un área para que se haga ejercicio, pero el deporte de alto rendimiento tiene mucho más costo porque ya has reclutado a quien destaca, generalmente entre niños y adolescentes, y lo has destinado, en teoría, a solamente concentrarse en mejorar sus técnicas, trabajar sus debilidades, fortalecer sus fortalezas y, en ese sentido, el atleta de alto rendimiento en todos los países del mundo es un ciudadano de élite”, puntualiza.
Las medallas de República Dominicana
En las olimpiadas de 2008 y 2012 el país ocupó el puesto 47 y 46, respectivamente, al ganar cuatro medallas entre ambas justas, dos de oro y dos de plata.
El cronista opina que no es casualidad que de Monte Plata hayan salido tres ganadores olímpicos.
“Y digo que no es casualidad porque Monte Plata es uno de los pocos casos donde una inversión de juegos nacionales, producto del buen cuidado de la infraestructura deportiva, generó un rendimiento de atletas de esa zona que todavía se nota, porque Luisito Pie es de esa zona”, destaca.
El cronista recomienda aprovechar la inversión en el sector educación para volver a incrementar la práctica del deporte escolar y universitario.
“Yo recomendaría que volvamos a concentrarnos en el deporte infantil y juvenil. La escalera comienza por abajo. En la medida en que ampliemos la base la punta de pirámide va a ser más alta. Es tan simple como eso. Volvamos a concentrarnos en el deporte escolar”, agrega.
Creso: Iniciativa privada
El sector privado complementa la inversión que hace el Estado para los atletas de alto rendimiento, a través de Creso, entidad que surgió por iniciativa de Felipe Vicini.
Dionisio Soldevila, director ejecutivo de Creso, sostiene que a pesar de que el gobierno es quien da la mayor parte de los aportes para los atletas, siempre hace falta un “poquito más”.
“Nosotros la damos (el aporte económico) al Comité Olímpico, primero, y el Comité la da a la federación. Apoyamos 15 federaciones, pero no son a las federaciones completas, sino a un grupo de atletas específicos de cada federación”, explica.
Soldevila declara que cada cuatro años, dependiendo el ciclo y cómo van los atletas, se hace una especie de revisión técnica y se trabaja con los que tienen una mayor expectativa para alcanzar juegos olímpicos.