[dropcap]A[/dropcap]unque la gestión de Danilo Medina tarda en ofrecer cifras aproximadas sobre los daños provocados por las inundaciones a la agricultura, sobre todo en la región Cibao y en la Línea Noroeste, los productores de banano y arroz adelantan cálculos desalentadores, mientras se preparan para meses difíciles en términos económicos, debido a la destrucción de sus cultivos y a imposibilidad de exportar a los mercados habituales.
A orillas del río Yaque del Norte se encuentran inundadas 112,000 tareas de banano, con una pérdida aproximada de RD$2,800 millones, estima Marcos José Rodríguez, presidente de la Asociación Agrícola Monte de Sión (Asamsi), de Mao, Valverde, con 43 afiliados.
Rodríguez sostiene que esas pérdidas aumentarán conforme sigan las inundaciones y además por los daños “de caminos, drenajes, canales de riego, infraestructura de las fincas”.
De hecho, los pronósticos de la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet) siguen anunciando lluvias. El fin de semana el organismo advirtió que las condiciones del tiempo continuarán bajo la incidencia de dos vaguadas, una localizada al norte de Puerto Rico moviéndose hacia el este y la otra ubicada al sur de la isla con ruta al oeste. Ambos fenómenos se alejan, pero dejan nubosidad y otro similar se acerca a la costa norte del territorio dominicano.
“Cabe destacar que hay por encima de 30,000 familias que dependen de los empleos directos de las fincas, las cuales se encuentran sin labores”, indica Rodríguez, quien también preside la Asociación de Productores de Arroz del Noroeste (Asoprano), con más de 80 afiliados.
Asegura que de ese rubro fueron afectadas unas 30,000 tareas, “una parte por las inundaciones, que es la pérdida total y la otra parte por las prolongadas lluvias que lo afectaron desde su estado de floración, llenado y recolección”.
Indica que aunque la mayoría de los arroceros pudieron cosechar, la producción resultó “muy baja y de mala calidad”. Dice que el arroz, que produce hasta entre 5 y 5.5 sacos por tarea, sólo rindió para dos y tres.
Impacto de las inundaciones
Félix Antonio Sánchez, de la Asociación de Bananeros de Exportación de Montecristi (Asexbam), que agrupa a 192 productores, estima las pérdidas generales en más de RD$4,000 millones, si se suman la destrucción de caminos y el impacto en las fincas.
“Las lluvias empezaron a principio de noviembre y a mediados del mes empiezan las inundaciones por los desfogues de la presa de Tavera que afecta desde La Canela, en Santiago hasta Montecristi”. Sánchez tiene más de 100 tareas de guineo con más de 20 días inundadas.
“El sector bananero estaba exportando unas 350 mil cajas de guineo a la semana. En la asociación exportamos 25 mil cajas”, explica. Indica que solo su asociación ofrece más de 70 empleos directos y más de 400 temporales.
Mientras, el presidente de la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), Osmar Benítez, asegura que entre las pérdidas por lluvias ocupan un lugar importante la producción de vegetales chinos de La Vega y el Cibao Central, dañado entre un 70% y un 80%.
“Además de la destrucción de los cultivos, a esto se suma que la crecida del río Camú se llevó parte de la capa vegetal de las parcelas. Es una pena, porque precisamente en este momento es cuando se ha iniciado la siembra de esos vegetales para aprovechar la ventana de invierno de Estados Unidos y Canadá”, agrega.
Benítez asegura que el país exporta unos US$100 millones en vegetales chinos al año, pero que esa cifra se reducirá a la mitad.
Resalta que, por el momento, todas las cifras son preliminares hasta que los técnicos del Ministerio de Agricultura tengan acceso libre a las plantaciones y puedan hacer una evaluación a fondo de todos los daños.
La información tarda en fluir
elDinero gestionó de manera insistente, y sin ningún éxito, con el Plan Social de la Presidencia información sobre la inversión que ha hecho el Estado para auxiliar a las personas afectadas en las zonas de inundación. Lo mismo sucedió con el Ministerio de Agricultura. Ambas dependencias alegan que están en medio de la crisis y que mientras las lluvias no cesen no podrán calcular los daños.
Sólo el ministro de Obras Públicas, Gonzalo Castillo, había calculado hace una semana, también en forma provisional, que las pérdidas por daños a la infraestructura vial superaban los RD$20 mil millones.