El Distrito Industrial Haina tiene un estimado de 1,291 empresas, donde el 78.5% corresponde a empresas de servicios, un 20.4% es industrial y un 1.1% es del sector agropecuario. Está conformado de la siguiente manera, en el sector servicio: 404 empresas dedicadas al comercio; 329 a otros servicios; 123 empresas en el ramo de almacenamiento y 49 en el ámbito de alquileres.
El sector industrial está clasificado de la siguiente manera: 179 empresas están dedicadas a la manufactura; 82 al área de construcción y 3 a la minería, mientras que en el sector agropecuario: 6 empresas están en servicios agropecuarios y 4 empresas son agrícolas.
Estos datos fueron el resultado de un estudio auspiciado por la Asociación de Industrias y Empresas de Haina y Región Sur (AIEHaina y el Sur), que, además, detalla la conformación del tejido empresarial de la zona.
Según el estudio, que fue presentado a finales de enero pasado, el Distrito Industrial de Haina está compuesto en su mayoría por micro y pequeñas industrias, con un total de 1,229; en tanto que 40 son medianas y 22 grandes industrias.
Este estudio hace una medición cuyo horizonte de tiempo alcanza casi una década (2010-2018) y esto es un muy importante porque nos permite medir su real impacto y la consistencia de este en un período de tiempo significativo.
“A nivel de las empresas, se observa que, para 2018, una empresa de Haina generó en promedio un valor agregado de RD$19 millones, cifra superior en un 97% a los RD$9.6 millones producidos en una empresa promedio del sector formal. Esto refleja una mayor productividad de las empresas de Haina”, precisa el estudio que fue realizado por la firma CIEF Consulting bajo la coordinación de los economistas Raúl Hernández y Julio Lozano. El valor agregado de Haina al cierre de 2018 alcanzó los RD$24,659.6 millones, lo cual representa un aumento de RD$6,076.9 millones con respecto al año 2010.
El aumento observado-refiere el estudio- entre 2018 y 2010 equivale a un crecimiento acumulado de 32.7% y a un crecimiento anual promedio de 3.6%, en ambos casos, dichas tasas son inferiores a las exhibidas por la economía formal de República Dominicana (102% y 9.2% respectivamente).
En cuanto a las exportaciones del Distrito Industrial de Haina al cierre de 2018 totalizaron los RD$13,265.4 millones, valor que representa un aumento de RD$10,868.8 millones con respecto al año 2010. Ese aumento observado entre 2018 y 2010 equivale a un crecimiento acumulado de 453.5% y a un crecimiento anual promedio de 23.8%, en ambos casos, dichas tasas son superiores a las exhibidas por la economía formal del país (241.9% y 16.6% respectivamente).
Lo que es más significativo, según el hallazgo del estudio, es que ese crecimiento de las exportaciones de Haina en comparación con el resto de la economía implica un aumento en su participación dentro del valor total de las exportaciones, pasando de 2.7% en 2010 a 4.4% en 2018.
El estudio también analiza el impacto en términos de aporte en materia de impuestos, compras internas, ventas, seguridad social, salarios y empleos.
Con la publicación reciente de este estudio denominado: “Impacto del Distrito Industrial de Haina y Región Sur en la economía dominicana”, se ha hecho un valioso aporte al país en términos de poner en debate, con datos, el alcance de una zona industrial, que, a mi juicio, es una de las más importantes del país.
Por muchos años, hemos sabido que la zona industrial de Haina, como se le conoce popularmente, tiene un notable aporte a la economía, pero nunca se había alcanzado a medir concretamente este aporte. Por eso, aprovecho para destacar la importancia de este estudio y felicitar al gremio empresarial por tener esta visión.
El estudio plantea que por las características socio territorial, caracterizada por la presencia activa de grupo empresarial y de una comunidad de personas, Haina debe ser nombrada como un Distrito Industrial. “Haina tiene todas las características para ser nombrada como Distrito Industrial de Haina. Distrito Industrial de Haina genera, para las empresas en él ubicadas, múltiples economías de escala que se traducen en un conjunto de ventajas asociadas a la reducción de costos, aumentos de la eficiencia productiva, estímulo de la creatividad, innovación y transferencia de conocimientos”.