Debido a que los indicadores de empleo en los primeros cuatro meses del año ya muestran un deterioro de las condiciones laborales y tomando en cuenta las nuevas proyecciones del PIB por los efectos del covid-19 en la economía global, se espera que la tasa de desocupación regional se ubique en alrededor del 13.5% al cierre de 2020, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
La Cepal observa, en su informe “Enfrentar los efectos cada vez mayores del covid-19 para una reactivación con igualdad: nuevas proyecciones”, que el 13.5% representa una revisión al alza (2 puntos porcentuales) de la estimación presentada en abril de 2020 y un incremento de 5.4 puntos porcentuales respecto del 8.1% registrado en 2019.
El número de desocupados en América Latina llegaría a 44.1 millones de personas, lo que representa un aumento cercano a 18 millones con respecto al los 26.1 millones del año pasado.
“Estas cifras son significativamente mayores que las observadas durante la crisis financiera mundial, cuando la tasa de desocupación se incrementó del 6.7% en 2008 al 7.3% en 2009 (0.6 puntos porcentuales)”, indica el informe.
En el caso de República Dominicana, el Banco Central había establecido una reducción de casi un 1% de la población ocupada durante el primer trimestre del año.
Mientras, entre enero y marzo, más de 42,000 personas salieron de las filas de la ocupación.
Según la Encuesta Nacional Continua de Fuerza de Trabajo (ENCFT) la población ocupada en el primer cuatrimestre era de 4,605,874, registrando una reducción de 42,764 personas (0.9%) en relación a igual periodo de 2019, lo que se atribuye en gran medida al inicio del impacto de la limitación de las actividades económicas desde la segunda mitad de marzo debido al impacto del nuevo coronavirus.
La Cepal explica que la revisión a la baja de las perspectivas de crecimiento y el consiguiente aumento de la desocupación se traducirán en un deterioro aún mayor de la situación prevista en lo referente a la pobreza y la pobreza extrema.
Proyecta que el número de personas en situación de pobreza se incrementará en 45.4 millones en 2020, con lo que el total de personas en situación de pobreza pasaría de 185.5 millones en 2019 a 230.9 millones en 2020, cifra que representa el 37.3% de la población latinoamericana.
“Dentro de este grupo, el número de personas en situación de pobreza extrema se incrementaría en 28.5 millones, pasando de 67.7 millones de personas en 2019 a 96.2 millones de personas en 2020, cifra que equivale al 15.5% del total de la población”, cita el informe.
La secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena, explicó que debido a los efectos del covid-19 en República Dominicana, la pobreza llegará a 24.7% este año, alrededor de dos millones 700 mil personas más que en 2019.
Según los datos de Oficina Nacional de Estadística (ONE), el año pasado, para el contexto nacional, la pobreza general se ubicó en 21.0%, registrando una disminución de 1.8 puntos porcentuales, en comparación con 2018, cuando se situó en 22.8%.
República Dominicana tiene una tasa de pobreza extrema que se sitúa entre el 5% y el 10%, según el informe “Panorama Social de América Latina 2018” de la Cepal, publicado en enero de 2020.
El panorama arrojó que, en comparación con otros países de América Latina, el país tiene una tasa de pobreza extrema mayor que Argentina, Chile, Costa Rica y Uruguay, donde ese indicador se sitúa por debajo del 5%.
Para el economista Antonio Ciriaco Cruz, de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), la crisis económica que vive el país provocada por el covid-19, ya está provocando un aumento en el número de personas que vive por debajo de la línea de la pobreza.
“Sin embargo, en esta ocasión, a diferencia de la crisis de 2003, hay alrededor de 850,000 hogares que reciben algún tipo de transferencia monetaria de parte del Gobierno”, dijo.
Añadió que los más afectados en esta crisis son sectores de clase media, grupos informales que aún no reciben ayuda del Estado y aquellos tipificados o clasificados como “vulnerables o de riesgos” que ven disminuido sus ingresos y vuelven a estar por debajo de la línea de pobreza debido a la crisis económica.
“En el caso de la pobreza extrema o indigencia, que según la ONE el año pasado se redujo 0.2 puntos porcentuales, al caer de 2.9% a 2.7%, este año, con los efectos negativos del nuevo coronavirus, alrededor de 30 mil personas se adicionarán como indigentes”, resaltó.
En lo respecta al mercado de trabajo, Ciriaco Cruz explicó que para este año la tasa de desempleo será aproximadamente de un 12%, lo cual significa que alrededor de un millón de personas estarían sin empleos. “Esto implica que la crisis provocada por el covid-19 adicionará alrededor de 500,000 personas desempleadas más que el año pasado, donde la tasa de desempleo era del 5.9% equivalente alrededor de 600 mil empleos”, especificó.
Según los datos de la ONE, en 2019 la incidencia de la pobreza general y de la extrema pobreza por zona geográfica, continuó disminuyendo en las zonas urbanas y rurales del país. En el ámbito urbano, la pobreza general se redujo de 22.1% a 20% (2.1 puntos porcentuales), en tanto que en el área rural se presentó una ligera reducción de 0.2 puntos porcentuales, al pasar de 25.6% a 25.4%.
En cuanto a la pobreza extrema, se observó un comportamiento similar en ambas zonas, con una reducción de 0.2 puntos porcentuales en los asentamientos urbanos y rurales.