Es increíble cómo una caída de los servidores de Google puede hacer que las empresas más importantes del mundo (y las no tanto) dejen de funcionar, pues directa o indirectamente dependen de algunos de sus servicios como Gmail, Google Maps, GoogleDrive, Google Calendar, Meets, entre otros.
Y pasó. Entre las 7:55 am y 8:30 am hora dominicana, de este 14 de diciembre, Google salió de línea y tuvo problemas en todo el mundo, no permitiendo el acceso ni a su buscador ni a las distintas herramientas asociadas de la compañía. La falla duró aproximadamente 35minutos, tiempo suficiente para que empleados detengan su labor sin saber qué hacer.
Desde el navegador de cualquier computador era imposible acceder a los servicios. En lugar de su acostumbrada carga rápida, nos dirigía a una respuesta de error 500. Se detectaron picos de quejas en Europa y Estados Unidos. En los smartphones ocurrió exactamente lo mismo. Desde muy temprano no se podían realizar búsquedas a través del asistente de Google o tratar de encontrar aplicaciones en Google Play para instalarlas. A la espera de un comunicado oficial, la cuenta de YouTube en Twitter habían confirmado los problemas en su plataforma.
A pesar de la caída del servicio, la publicidad en la plataforma de vídeos de Google continuaba mostrándose. Finalmente, los de Mountain View han emitieron un comunicado para explicar el porqué de la falla: “Google experimentó un fallo en el sistema de autenticación que se prolongó aproximadamente 45 minutos debido a un problema con la cuota interna de almacenamiento. Aquellos servicios que requieren la autenticación de los usuarios sufrieron altas tasas de errores durante este período, aunque el problema fue resuelto y todas las funcionalidades restauradas. Nos disculpamos con quienes se han visto afectados y prometemos una investigación exhaustiva para garantizar que esta situación no vuelva a repetirse”.
Se descarta así la hipótesis de un ataque informático, como se había creado en las distintas redes sociales.
Ahora bien, ¿qué significa esto? A simple análisis podemos concluir que ningún monopolio es saludable. La humanidad, y cuando decimos esto nos referimos a la economía global y todo lo que ello implica, debe depender de un solo servicio. Muchas cosas pueden suceder durante el apagón tecnológico de una empresa tan importante como Google. Poner los huevos en una sola canasta pone en riesgo no sólo la estabilidad económica de las empresas, sino de países.
Este hecho también recuerda las veces que Google ha tenido que enfrentar la justicia, en diferentes países, por supuestas prácticas monopólicas. Quizá esta caída le dé la razón a quienes entiende que este monopolio podría ser perjudicial para el desarrollo social y económico del mundo.