Desde la transición, antes de asumir la Presidencia de la República, Luís Abinader, había anunciado la eliminación de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE), debido a la duplicidad de funciones con el ministerio de Obras Públicas y a la cantidad de escándalos de corrupción que frecuentemente surgen en torno a esa institución.
Pero, transcurridos cerca de seis meses del gobierno de Abinader, todavía la OISOE se mantiene en pleno funcionamiento, con el agravante de que, según datos de su portal institucional, ha aumentado la cantidad de empleados en más de un 83%.
En junio de 2020, un mes antes de las elecciones presidenciales, la OISOE registraba una nómina de 481 empleados fijos. Sin embargo, a diciembre de 2020, tras cuatro meses de gestión gubernamental, la nómina de esa institución alcanza los 881 empleados, es decir, 400 más de los que tenía antes. Eso es: “mucho más de lo mismo”.