El producto interior bruto (PIB) de Japón se contrajo un 0.8% entre julio y septiembre con respecto al trimestre precedente debido principalmente a la caída del consumo doméstico, informó este lunes el Gobierno.
En el citado período, la tercera economía mundial creció no obstante un 1.4% en comparación con julio-septiembre de 2020, según los datos preliminares de la Oficina del Gabinete japonés.
Entre los pasados meses de abril y junio, el PIB nipón había avanzado un 0.4% con respecto al trimestre precedente y un 7.6% interanual, impulsado por el repunte del consumo y de la inversión corporativa, según muestran los datos revisados.
El descenso trimestral del PIB supera las previsiones de la mayoría de analistas y se debe principalmente al nuevo retroceso del gasto de los hogares, del 1.2%, en un período en que las principales regiones del país estuvieron al máximo nivel de alerta sanitaria debido a la crisis del coronavirus.
Las exportaciones, otro de los motores de la economía nacional, descendieron en el tercer trimestre del año un 2.1% a causa del continuado impacto en la demanda global de la pandemia y de los problemas en la cadena de suministro.
Entre abril y junio, tanto el consumo doméstico como las exportaciones de Japón habían repuntado gracias a la mejora de la coyuntura y de la situación sanitaria en el país asiático.
La inversión pública también disminuyó en julio-septiembre frente al trimestre precedente, en un 1.5%, mientras que la inversión de capital corporativo disminuyó un 3.1%.