El producto interior bruto (PIB) de China creció un 8.1% en 2021, según datos oficiales publicados este lunes.
Pekín se había marcado como objetivo que la economía nacional creciese “más de un 6%” a lo largo del recién terminado año, una meta más conservadora de lo esperado por los analistas, especialmente teniendo en cuenta lo reducido de la base comparativa del año pasado (+2.3%).
Las cifras ofrecidas hoy por la Oficina Nacional de Estadística (ONE) también muestran que el PIB creció un 4% interanual en el cuarto trimestre de 2021, una cifra mayor que la esperada por los analistas, de en torno a un 3.6%.
Esto también supone un avance del 1.6% en la comparación con el cuarto trimestre anterior, lo que supera de nuevo las previsiones de los expertos (+1.1%).
En los tres primeros trimestres, el crecimiento interanual había sido del 18.3%, el 7.9% y el 4.9%, respectivamente.
A finales de diciembre, la riqueza total de China alcanzaba los 114.37 billones de yuanes (US$17.99 billones, €15.77 billones) en términos nominales.
La ONE aseguró que, en 2021, la economía china “siguió recuperándose de forma sostenida” y que los principales indicadores “alcanzaron los objetivos esperados”.
Aunque la institución presume de que China está en una “posición de liderazgo mundial” en lo que a desarrollo económico y control de la pandemia se refiere, también reconoce un entorno exterior “más complejo, grave e incierto” y la amenaza de las “presiones” sobre la economía nacional por factores como la contracción de la demanda y los problemas de suministro.