Bajar los costos de los productos de la canasta básica familiar y el precio de los combustibles, fruto de la inflación, agravada por la guerra entre Rusia y Ucrania, es el principal reto que tiene la economía dominicana.
Así lo expresó el presidente Luis Abinader, durante su segundo discurso de rendición de cuentas, en el que destacó que sólo en lo que va de este 2022 el Gobierno ha subsidiado RD$2,600 millones en relación al petróleo y sus derivados, mientras que en 20221 fueron más de RD$13,000 millones, así como otros montos para productos comestibles.
“El Gobierno está haciendo las previsiones presupuestarias y medidas de control de gasto para continuar subsidiando y evitar que la totalidad del alza se refleje en el precio de los combustibles”, subrayó el jefe de Estado, en ocasión al 178 aniversario de la Independencia de República Dominicana.
Agregó que su gestión hará todo lo que esté en sus manos para mitigar los efectos inflacionarios y proteger el bienestar de los dominicanos.
Esto, de acuerdo al mandatario, implicaría ajustes y modificaciones al presupuesto “ante esta situación especial de distorsión e inflación de todas las materias primas en el mundo”.
Anunció, además, que por los últimos eventos bélicos entre Rusia y Ucrania con repercusión mundial, el Gobierno local va aumentar la ayuda social directa, desplegar programas especiales de venta de comida, subsidios focalizados que ayuden a todos los dominicanos, “pero, sobre todo, a los que menos tienen, que son los que más necesitan”.