“Todo lo que voy a decir hoy, pudiera resumirse en una sola oración: El Gobierno tiene la intención de que República Dominicana alcance el grado de inversión en un plazo no mayor de diez años”.
Enfático, el ministro de Hacienda, José Manuel (Jochi) Vicente, inició así su discurso como orador invitado del primer almuerzo celebrado por la Cámara Americana de Comercio (AmchamDR), tras la vuelta a la presencialidad, mostrando la importancia que la actual administración da al mercado de capitales para captar recursos que permitan enfrentar las repercusiones que ha tenido la pandemia y la guerra ucraniana sobre la economía dominicana.
En un contexto donde la elevada inflación torna sensible el diálogo para aumentar las recaudaciones internas a través de una reforma fiscal en el corto plazo, el Gobierno apuesta a mejorar la imagen crediticia del país frente a instituciones calificadoras e inversores. De esta manera, espera impulsar positivamente su acceso a financiamiento frente a otros países ante un panorama global en el que persistirá la incertidumbre más allá de las estimaciones.
Aunque Vicente reconoce que superar el grado especulativo en el que actualmente se encuentra República Dominicana es una meta “maratónica” que se toma “más de un gobierno”, considera que la estabilidad macroeconómica del país y la capacidad con la que pudo recuperarse de los embates del covid-19 durante el 2021 permitirán alcanzar este objetivo.
“Lograr ser grado de inversión es llegar más rápido y con un menor costo al desarrollo social y económico que todos deseamos”.
Desarrollo institucional
El titular de la principal institución al frente de las finanzas públicas apuntó que uno de los puntos de mejora más importantes para alcanzar el grado de inversión radica en la debilidad de la institucionalidad pública, la cual se mide a través de indicadores relacionados con el control de la corrupción, el imperio de la ley y la efectividad de gobierno.
Al respecto, manifestó que las autoridades están siendo “intransigentes” con la violación a las leyes, a fin de que la administración pública se realice bajo mayor transparencia.“En el caso de las finanzas públicas, hemos descontinuado la mala práctica de registrar gastos “por debajo de la línea” aun cuando eso implique registrar un mayor déficit fiscal (…) Se acabaron las operaciones financieras de final de año para aumentar la deuda pública y no registrar el gasto”, subrayó.
Destacó, además, las muestras dadas para preservar la independencia del Ministerio Público, ya que el control de la corrupción y la garantía de que la impunidad no será tolerada mejoran los indicadores institucionales de Gobernanza de República Dominicana, que actualmente se encuentra en la posición 125 de este parámetro, publicado por el Banco Mundial.
“Por eso no podemos permitir que estos logros puedan ser revertidos por razones políticas o por falta de visión de futuros gobiernos. Y por eso es nuestra insistencia por dejar cimentado todo lo relativo a la independencia del Ministerio Público”, rescató.
Manejo de pasivos
Con el objetivo de mantener la imagen positiva de la gestión fiscal en el mercado financiero internacional, el Ministerio de Hacienda ha realizado tres operaciones de manejo de pasivos, con la reprogramación de vencimientos de forma ordenada por montos de US$2,422 y RD$92,427 millones (alrededor de US$4,000 en total).
El ministro resaltó que estas operaciones eliminaron el riesgo de que la calificación de la deuda dominicana se degradara, lo que iba a tener como consecuencia un encarecimiento del crédito y una mayor dificultad para poder acceder a él, por lo que ahora el país se encuentra mejor posicionado que antes, “incluso sin la reforma fiscal”.
“Ante un ambiente internacional tan volátil e incierto, desde el Ministerio de Hacienda decidimos reducir los riesgos de refinanciamiento de nuestro país en el corto plazo. Y hoy les puedo decir (…) que el país no tiene riesgos de refinanciamiento en el corto plazo. No todos los países pueden afirmar esto con tanta firmeza”.
Vicente resaltó que estas acciones ya han recibido el reconocimiento de República Dominicana como un mercado emergente atractivo.
“El banco de inversión Morgan Stanley considera el país como uno de los mercados emergentes más atractivos, y se refiere al país como ‘un punto brillante en los mercados emergentes’. Por su parte, tanto Standard and Poor’s como Fitch Ratings han cambiado de ‘negativa’ a ‘estable’ la perspectiva del país”.
Aunque el ministro reconoce que lo ideal sería de que el país pudiera disfrutar de un superávit fiscal en el que no fuera necesario recurrir a los mercados financieros para cubrir parte de los gastos del presupuesto, explicó que las operaciones de manejo de pasivos permitieron reducir los pagos de deuda vieja en el presupuesto del 2022 de manera significativa.
En el presupuesto del 2021, el 51.4% de las fuentes financieras se destinaron a este concepto, mientras que en el presupuesto de este año la proporción será solo de un 36%.
Acciones
Aunque todavía es muy temprano para plantear la necesidad de aumentar las recaudaciones internas a través de la reforma fiscal, el ministro de Hacienda expresó que el Gobierno continuará mejorando la administración pública “para hacer más justo el sistema, atacando la evasión y la elusión y al mismo tiempo, aliviando complicaciones a la vida de los contribuyentes”.
En ese sentido, mencionó como acciones realizadas la iniciativa de la ley de facturación electrónica y la digitalización de los procesos fiscales.
De igual forma, mencionó que el Ministerio de Hacienda se reunió con una comisión del Fondo Monetario Internacional (FMI) para tratar temas relacionados con la implementación de una Ley de Responsabilidad fiscal.
“La idea es contar con una con una herramienta que permita tener un control más eficiente de los gastos e ingresos públicos. La asistencia técnica tiene como objetivo evaluar los sistemas e instituciones de la gestión financiera pública, a fin de proponer compromisos firmes y duraderos que no dependan de las coyunturas políticas”.