Dice un adagio popular que “el matrimonio es como el denomino”. Esta frase tiene muy poca o nula verdad, pues, aunque en una relación no todo es color de rosa, dar el “sí, quiero” ofrece estabilidad emocional, social e incluso, financiera, si se equilibra correctamente.
En República Dominicana las estadísticas oficiales lo evidencian. En 2021, la tasa de matrimonios (con 45,292 casamientos) superó la de divorcio (con 28,694 rupturas registradas) a pesar de esta última ir en ascenso, de acuerdo a cifras de la Oficina Nacional de Estadística (ONE).
Una razón de las separaciones, aunque no está explícito en los datos locales, es la falta de organización financiera. Lo contrario a esa incoordinación, les permite a las parejas (casadas o en unión libre) disfrutar de varias ventajas financieras más que las que tienen los solteros.
Es decir, que los altibajos del matrimonio podrían valer la pena, además, cuando se trata de ahorrar para la jubilación y vivir cómodamente. Por ejemplo, una pareja casada tiene mayor posibilidad de tener una mejor jubilación. Si la esposa gana RD$30,000 al mes y el esposo RD$50,000, los ingresos al hogar (si se complementan) son RD$80,000, superior a la canasta básica familiar nacional del quintil más bajo.
Por tanto, pueden contribuir potencialmente más al ahorro, plan de jubilación o pago de hipoteca. ¿Y los gastos? Si bien es cierto que los egresos suelen ser mayores, sobre todo, si se tiene hijos, la realidad es que los egresos pueden ser compartidos de forma que ningún miembro se sienta abusado. O sea, equitativamente, no necesariamente igualitario.
Sin embargo, en el caso de quienes no tienen pareja, el promedio mensual de los ingresos asciende a unos RD$25,000. Por tanto, su calidad de vida se verá limitada.
Otras ventajas económicas
Presupuesto en común. Compartir los gastos representará un alivio para su bolsillo y economía familiar. Habrá mayor organización financiera.
Más probabilidad de ahorro. Las personas casadas suelen tener más dinero, entre varias razones por la estabilidad y porque entran más recursos económicos al hogar.
Compartir gastos. Una pareja puede apoyarse mejor al momento de pagar el alquiler de la casa, las facturas o gastos de los niños que un soltero. La carga se vuelve más ligera cuando es compartida.
División de costos. No solo se trata de dividir los gastos de la casa, sino que los viajes o bienes más costosos serán más asequibles si se comparte el monto.
Beneficio de jubilación. Las parejas casadas pueden beneficiarse de los seguros de fallecimiento o de la pensión de su compañero.
Facilidad hipotecaria. Para el crédito hipotecario estar casados y contar con buen historial crediticio aumenta la posibilidad de otorgarle el préstamo. Pues si usted está casado entran dos salarios en la cuenta y el riesgo de incumplimiento de pago disminuye. Ciertas entidades financieras toman en cuenta este factor.
Ahorro e inviersión. El excedente de sus ingresos no solo lo destine al ocio. Ahorre para invertir y generar ingresos extra. En un matrimonio no solo se comparten los gastos, sino también las deudas. Compartir las responsabilidades financieras hará que las cuentas salgan de una forma más fácil sin afectar su score crediticio.
Regalos de boda. En esta actividad llueven los obsequios para el hogar, lo cual hace más fácil el proceso de amueblar la casa. En cambio, si usted está soltero y decide mudarse solo es probable que deba costearse todo.
Seguro de vida. Basta con que un miembro de la pareja trabaje en el sector formal. La aseguradora incluirá en el seguro a su cónyuge.
Cuentas en conjunto. Además de las individuales, cuando usted tiene pareja puede optar por una cuenta de ahorro en común y así alcanzar más rápido sus metas financieras. O tener un fondo de emergencia para alguna situación imprevista con los niños, la casa o el vehículo.
Beneficios de la migración. Cuando los esposos son de distintos países, suelen disfrutar de los beneficios de la ciudadanía de ambos.
Cuatro aspectos clave
- Sinceridad. No caiga en infidelidad financiera. Sea honesto con sus ingresos, egresos y deudas.
- Presupuesto. Planifiquen sus finanzas en pareja. Ayudará a tener control y cumplir más rápido sus metas.
- Administración. Decida quién cubrirá X o Y gasto del hogar. No tiene que ser en partes iguales, sino equitativas.
- Ahorro e inversión. El excedente de sus ingresos no solo lo destine al ocio. Ahorre para invertir y generar ingresos extra.