En 2022 la factura de compra total de las distribuidoras a las generadoras para atender la demanda de la población se incrementó en US$823 millones adicionales comparado con 2021, indicó el presidente Luis Abinader.
Esto debido a que la guerra implicó un recorte gradual del suministro de gas desde Rusia hacia países de la Unión Europea, generando una subida del precio internacional del combustible. Esto hizo que el precio cerrara en un promedio de 38 USD/MBtu y que, a finales de agosto, se alcanzara la cota de los 99 USD/MBtu, según el marcador europeo de precios.
“A pesar de nuestra casi absoluta dependencia de la importación de combustibles y a diferencia de lo sucedido en otros países, República Dominicana no sufrió en 2022 crisis de abastecimiento de combustibles ni déficit de generación de electricidad”, expresó Abinader.
Fue todo lo contrario, aseguró el mandatario. “Terminamos el año con un servicio eléctrico muy estable, seguro y en franco crecimiento en capacidad de generación térmica y en renovables”, dijo.
Además, que estos estuvieron fundamentados en tres pilares. Primero, garantizar que la oferta o disponibilidad de potencia y energía sea suficiente para abastecer la creciente demanda y mantener una adecuada reserva fría.
Segundo, estimular la flexibilidad y diversificación del parque de generación para evitar la dependencia de un solo combustible. Y, tercero, promover la instalación de generación eléctrica basada en recursos renovables, principalmente energía solar y eólica.