Para los dominicanos, el béisbol es más que un deporte: es pasión, rivalidad entre los fanáticos de los equipos más populares, y la unión de fuerzas, en el reciente caso fallido, para tratar de derrotar a los puertorriqueños en el Clásico Mundial de Béisbol. Pero, ¿quiénes son los propietarios de los estadios de los seis equipos de béisbol dominicano?
Los Tigres del Licey y Leones del Escogido comparten el Estadio Quisqueya Juan Marichal en el Distrito Nacional, propiedad del Estado dominicano, bajo la dirección del ingeniero Bienvenido Martínez Brea, el cual fue construido con una inversión de RD$3.5 millones.
Este lugar fue inaugurado en 1955 bajo el nombre Estadio Trujillo durante la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, a su caída se denominó Quisqueya y en 2014 se le agrega el nombre de Marichal para exaltar al primer criollo en el Salón de la Fama de Béisbol en Cooperstown.
De acuerdo con los datos disponibles, el campo tiene capacidad para albergar 13,186 en eventos deportivos, mientras que para actividades artísticas puede ascender a 25,000 personas.
Las Águilas Cibaeñas tienen su sede en Santiago de los Caballeros, específicamente en el Estadio Cibao, también propiedad del Estado dominicano. Conocido como “El valle de la muerte” por los fanáticos, su anterior nombre era Leónidas Rhadames, el cual fue inaugurado en 1958 con una inversión de RD$1.5 millones, siendo el de menor costo para su construcción.
A pesar de ser construido por el ingeniero Bienvenido Martínez Brea, en 2004 y 2007 las autoridades nacionales destinaron RD$112.3 millones para la remodelación del terreno y acoger la Serie Mundial del Caribe en el 2008. Asimismo, reunir a 18,077 espectadores lo convierte en el centro con más capacidad del país, superando por 37% su homólogo el Quisqueya.
En 1979, el presidente Antonio Guzmán inauguró el Francisco Micheli en La Romana, convirtiéndose en la casa de los Toros del Este. Esta cancha está administrada por la Central Romana Corporation y reúne a 8,838 personas.
Los Gigantes del Cibao y las Estrellas Orientales inmortalizaron a su primer manager Julián Javier y al exbeisbolista de Grandes Ligas Juan Esteban Vargas, respectivamente, en dos estadios.
El primero, Julián Javier, está ubicado en San Francisco de Macorís, provincia Duarte, donde 10,000 espectadores lo conocen como “El establo de la muerte o la casa del terror”. Su administración está a cargo del empresario Samir Rizek. En el 2017 fue sometido a una reparación que costó RD$4 millones.
Mientras que el Tetelo Vargas fue inaugurado el 25 de noviembre de 1959 en San Pedro de Macorís bajo el nombre de Estadio Oriental, pero el Congreso Nacional designó en 2013 su cambio de nombre.
Además se ejecutaron dos remodelaciones en 2007 y 2010 por el Gobierno y el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones.
El campo, propiedad del Estado dominicano, fue construido por Bienvenido Martínez Brea en 1959 y agrupa unas 8,000 personas, siendo el de menor capacidad.
Conforme los datos de los portales de los seis equipos, estos centros deportivos pueden albergar 58,101 fanáticos al mismo tiempo.