Costa Rica registró un déficit financiero del 0.7% del Producto Interno Bruto (PIB) en el primer bimestre de 2023, el cual es menor a la cifra del mismo periodo del año anterior cuando fue de 1%, informó este viernes el Ministerio de Hacienda.
“Las cifras fiscales a febrero de 2023 reflejan un claro compromiso de la administración con las metas fiscales pactadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI)”, dijo el ministro de Hacienda Nogui Acosta.
Los datos oficiales también indican que si se excluye el pago de deuda en el primer bimestre de 2023, Costa Rica registró un superávit primario del 0.3% del PIB, que mejora el 0.1% que se presentó en el mismo periodo de 2022.
El informe indica que a febrero de 2023, la deuda de Costa Rica se ubica en el 59% del PIB proyectado para 2023, lo que supone 4.8 puntos porcentuales menos que el 63.8% con que cerró el 2022.
“El cumplimiento estricto de la regla fiscal, una mejor recaudación tributaria, así como la calificación favorable de riesgo crediticio por parte de las agencias calificadoras Standard and Poor’s y Fitch Ratings, permitirán robustecer el perfil de deuda del Gobierno Central”, afirmó el ministro Acosta.
El Gobierno de Costa Rica mantiene desde 2021 un acuerdo con el FMI para acceder a un financiamiento de US$1,775 millones a cambio de reformas estructurales y legislativas que le permitan al país bajar el déficit y la deuda.
Desde 2018 Costa Rica implementa una reforma tributaria que estableció el impuesto al valor agregado del 13 % y una regla fiscal para contener el gasto, entre otras disposiciones.
Costa Rica cerró el año 2022 con un déficit financiero del 2.5% del Producto Interno Bruto (PIB), el más bajo de la última década y además consiguió un superávit primario de 2.1% del PIB, el primero en 13 años.
Los números oficiales indican que Costa Rica cerró 2022 con una deuda del 63.8% del PIB, lo que representa una disminución en comparación con el 2021 cuando era de 68% del PIB.