[dropcap]“[/dropcap]Si hay dos cosas que nunca se van a poder proyectar en una película son la temperatura y el olfato”, así describe el director José María Cabral lo que significó rodar Carpinteros en las cárceles de Najayo Hombres, Najayo Mujeres y La Victoria durante cuatro semanas.
El filme de drama, basado en hechos reales que forman parte de la cotidianidad de esas prisiones, presenta la cruda realidad de los internos que mantienen una comunicación muy peculiar con las reclusas vecinas. Es a través del “carpinteo” que los presos se envían mensajes utilizando un lenguaje de señas únicamente conocido entre ellos.
Cabral cuenta que tenía ganas de producir una película, pero no tenía idea de qué podría tratar, hasta que se entera de este modo de vivir en las cárceles, lo cual despertó cierto interés en él para llevarlo a la pantalla grande y solo reflejar la parte humana y sensible que cada individuo tiene dentro de aquellas jaulas que la sociedad y las leyes denominan como cárceles. Al recordar sus visitas a esos lugares, Cabral describe las malas condiciones, donde predomina un un viejo modelo penitenciario que es inhumano para él.
“Pedí los permisos para ir a esas cárceles y así ver cómo podía aterrizar la idea de la película, porque tenía ganas de hacer una y cuando veo que los presos han desarrollado un lenguaje de señales entre una cárcel y otra como Najayo hombres y Najayo Mujeres digo: wao, qué increíble, cómo el ser humano, además de sus necesidades básicas como comer, dormir o respirar necesita comunicarse tanto así como lo otro y de ahí nace el amor”, expresa el director.
Agrega, “me quedé enamorado de cómo aún estando presas, las personas se liberaban comunicándose por señales, y así mismo liberaban el amor. Entonces, vi el potencial en eso y lo llevé al cine, dándole un toque más humano, ya que por lo regular las películas de cárceles solo hablan de abusos, droga o violencia”.

A Cabral le tomó nueve meses desarrollar el proyecto que requirió de una ardua investigación para recrear las escenas que formarían parte de la película. Asistía a las cárceles dos a tres veces a la semana para relacionarse con los internos, que según él vivían en condiciones inhumanas, pero para hacerlo, su staff (equipo de producción) tuvo que dividir el proceso en tres fases: conocer el ambiente, crear amistades dentro de las penitenciarias y hasta hacer el casting para “darle pa´ allá” como menciona el director.
El elenco de Carpinteros está compuesto por Jean Jean, Judith Rodríguez y el actor Ramón Emilio Candelario. Según Cabral, la cinta aún no tiene una fecha pautada para su estreno en República Dominicana, pero llegará a los cines en mayo.
Expectativas
Cabral destaca que gracias a la Ley de Cine (108-10) muchas películas han sido grandes éxitos, a pesar de todas las malas críticas que ha recibido, pero sin ella no es posible contar con los recursos económicos que demandan los filmes de calidad que el público merece, además de que impulsa al talento local para que este desarrolle historias más arriesgadas que pueden retratar al país desde distintas perspectivas y puntos de vista.
“El cine dominicano está dando un giro muy grande, pero su fuerza empezará a sentirse desde este año con nuevas propuestas que darán mucho de qué hablar. Esta será un país pequeño, pero con mucho cine de calidad que será exportable”, considera.
En cuanto a las expectativas que tiene Cabral sobre Carpinteros, expresa que “todo lo que ha venido con esta película ha sido una sorpresa, yo estoy muy emocionado, sí; pero espero que la película tome el curso que tenga que tomar porque de nada me sirve tener expectativas e ilusionarme porque lo hecho, hecho está. Lo demás dependerá del público y de los festivales”.
El infiltrado
Durante su visita a elDinero, Cabral reveló que es una persona que ama y se divierte con las expresiones que hacen las personas cuando van al cine a ver sus películas. “Suelo infiltrarme en las salas de los cines con una capucha para ver por detrás de mi asiento cómo reaccionan los demás. Lo que se siente es inexplicable y me llena de gran satisfacción que la gente vea lo que hago y le guste”, dice entre risas.
Sundance Film Festival
Carpinteros es la primera película dominicana en entrar al Sundance Film Festival que lleva 33 años realizándose. Este recibe anualmente más de mil producciones, pero solo se eligen 12. La cinta de José María Cabral no entró por casualidad, sino por la trama y la calidad de su guion, además de los elementos que recoge.
Según el director, fue algo inesperado porque solo la envió para participar sin ninguna esperanza, pero el equipo que organiza el evento aprobó el proyecto y ha dado cabida al cine local.