El bitcóin, la moneda virtual más famosa, sigue dando de qué hablar. A simple vista no se vislumbra un horizonte seguro para quienes han invertido dinero verdadero en algo que está “en ningún lugar”. El gobierno de Estados Unidos, una de las economías más abiertas, aún mantiene sus puertas cerradas a este medio de pago, si es que así se le puede llamar.
Su valor, sin embargo, sigue sorprendiendo a los más escépticos del mercado. Se cotiza a un promedio de US$11,800, una ganancia promedio de 5% en los últimos días. ¿Cómo es posible que una moneda (o lo que sea) pueda costar US$11,800 la unidad? ¿Qué la hace tan atractiva para invertir? ¿Por qué hay quienes apuestan a su estabilidad? ¿Qué es en realidad? Cada bitcóin es un archivo en una computadora que se almacena en una “cartera digital” de un teléfono inteligente o un ordenador.
El premio nobel de economía Joseph Stiglitz (2001) considera que esta moneda virtual debería ser prohibida, los multimillonarios Carl Icahn y Warren Buffett advierten de una burbuja que explotará en cualquier momento y Bloomberg TV, a través de una nota publicada en CNN, afirma que “el bitcóin tiene éxito solo por su potencial de elusión y que no cumple ninguna función socialmente útil”.
El principal ejecutivo de Goldman Sachs, Lloyd Blankfein, atribuye su alto valor a que es un “vehículo para perpetrar fraudes”. Anteriormente atrajo la burla del jefe de JPMorgan, Jamie Dimon, quien la llamó un “fraude que eventualmente explotaría”.
Business Daily, del Servicio Mundial de la BBC, le hizo algunas preguntas a Stiglitz: ¿Por qué la gente quiere bitcóins? ¿Por qué la gente quiere una moneda alternativa? Su respuesta fue tajante: La verdadera razón por la cual la gente quiere una moneda alternativa es para participar en actividades viles: lavado de dinero y evasión fiscal. Lo que a su juicio debería suceder es exigir la misma transparencia en las operaciones financieras con bitcóins que la que se les exige a los bancos. “Si así se hiciera el mercado del bitcóin simplemente colapsaría”, prevé.
Según una nota de la agencia EFE, el gobernador de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos y encargado de supervisión de Wall Street, Randal Quarles, alertó sobre los “graves problemas para la estabilidad financiera” que podrían generar monedas virtuales como el bitcóin si crece su volumen por carecer de respaldo institucional. Sin embargo, la Comisión de Negociación de Futuros de Materias Primas (CFTC), que preside J. Christopher Giancarlo, autorizó a dos bolsas y a un corredor a negociar productos de inversión vinculados a la moneda virtual bitcóin.
“Aunque estas monedas digitales pueden no suponer grandes preocupaciones a los niveles actuales de uso, pueden originarse problemas de estabilidad financiera más graves si alcanzan un uso a gran escala”, dijo Quarles en su intervención en una conferencia en el Departamento del Tesoro en Washington.
Expectativas
Las palabras del supervisor de la Fed se producen en un momento de inquietud acerca del posible estallido de la burbuja del bitcóin, cuyo precio se ha multiplicado por diez en menos de un año y superó los US$11,000 desde la última semana.
Afirmó que “sin el apoyo de un activo de un banco central o respaldo institucional, no está claro cómo se comportaría una divisa digital privada en el centro de un sistema de pagos de gran escala, o si sería capaz de funcionar, en momentos de tensión”. Quarles asumió recientemente el cargo tras ser nominado por el presidente estadounidense, Donald Trump, y ratificado por el Senado.
Giancarlo, según EFE, reveló que sostuvo conversaciones importantes con las plataformas de intercambio concernidas y aceptaron aportar mejoras significativas para proteger a los clientes y mantener ordenados a los mercados. Se desconoce si el funcionario estadounidense habló con Craig Wright, el empresario y científico computacional australiano que afirma ser Satoshi Nakamoto, el alias del creador de la moneda digital bitcóin. Todo está por confirmar.

Sin embargo, la CFTC admite que estatutariamente tiene una capacitada limitada para supervisar al bitcóin en el mercado al contado. Esa moneda virtual, creada con la llamada tecnología “blockchain”, se transa en línea y no es regulada ni respaldada por ningún país o entidad financiera sino que es manejada por una vasta comunidad de internautas.
Ninguno de los expertos ha relacionado el éxito virtual del bitcóin con la posibilidad de que le quite espacio a las transacciones de negocios regulados, los cuales sí cumplen con todas las normas de transparencia que exigen los organismos reguladores y entidades internacionales. Lo que sí se sabe es que transar con un bitcóin no exige decir de dónde ni cómo se obtuvo el dinero.
Las autoridades del Banco Central, en el caso de República Dominicana, han advertido que quienes inviertan en monedas virtuales lo hacen a su propio riesgo, ya que no cuentan con el respaldo de esa institución ni del Estado.
En junio de este año, en un foro organizado por la Cámara Británica de Comercio (Britcham), el gobernador del Banco Central (BC), Héctor Valdez Albizu, advirtió que “los activos virtuales como bitcóin, litecoin y ethereum, entre otros, no cuentan con el respaldo de esa entidad y, por lo tanto, no gozan de la protección legal que otorga el marco jurídico dominicano.
Moneda sin respaldo
Según Valdez Albizu, estos activos virtuales reflejados en muchos medios de comunicación no pueden ser considerados como divisas extranjeras bajo el régimen cambiario, “puesto que no son emitidos ni se encuentran bajo el control de ningún otro banco central extranjero, razón por la cual no reciben las garantías ni seguridad que ofrece la intermediación cambiaria ni la libre convertibilidad consagradas en los artículos 28 y 29 de la Ley Monetaria y Financiera”.
Apuntó que “los activos virtuales mencionados no son una moneda de curso legal y, por sí mismos, no poseen fuerza liberatoria, por lo que no puede ser garantizado su uso como medio de pago en nuestra economía, ni ninguna persona está en la obligación de aceptarlos como medio de pago de bienes o servicios prestados”.
En declaraciones de julio de este año a elDinero, el economista Ernesto Selman consideró que el auge de las criptomonedas a nivel mundial se debe a que representan una competencia a las monedas tradicionales que han perdido credibilidad, principalmente luego de la crisis financiera global. “Los bancos centrales del mundo han emitido dinero inorgánico y eso ha despertado la desconfianza de muchos inversionistas en cuanto al futuro del papel moneda como lo conocemos hoy en día”, asegura.
Ariel García, dueño del establecimiento Tattooarium y consultado por elDinero también en julio pasado, donde está uno de los cuatro cajeros de bitcóin que hay en el país, explicó que al lugar acuden de 10 o 15 personas todos los días a comprar o a vender la moneda virtual. Explica que para utilizarlo es necesario descargar una aplicación en el celular y crear una cuenta con el correo electrónico, nombre y contraseña para luego obtener una “cartera electrónica”.
Trayectoria del bitcóin
El éxito en los últimos años del bitcóin, que comenzó a distribuirse en la red en 2009, ha llevado a la creación de otras divisas virtuales, como Ethereum, cuya cotización ha pasado de unos 10 dólares en enero a cerca de 480 dólares en la actualidad.
Pese las numerosas advertencias sobre una posible caída repentina del valor del bitcóin, algunas voces sostienen que la cotización todavía tiene recorrido al alza.
Su valor es muy volátil. Cuando apareció en 2009 no valía más que unos pocos centavos. A comienzos de 2017 cotizaba a 1,000 dólares y esta semana superó los US$10,000.
La Bolsa Mercantil de Chicago anunció que desde el día 18 transará contratos de bitcóin a término. También basado en Chicago, el mercado bursátil CBOE espera anunciar “pronto” la fecha de lanzamiento de sus propios contratos a término.
La firma de corretaje Cantor Fitzgerald también recibió luz verde para negociar productos financieros vinculados al bitcóin. Cantor planea comenzar el año que viene.
El bitcóin como fondo de inversión
El regulador bursátil de Estados Unidos rechazó en marzo una petición planteada hace cuatro años para lanzar por primera vez un fondo de inversión cotizado ligado al valor del bitcóin. La decisión fue adoptada por la Comisión del Mercado de Valores (SEC) y estaba relacionada con una solicitud que hicieron los hermanos Cameron y Tyler Winklevoss para lanzar un nuevo fondo cotizado, Bitcóin ETF.
El regulador rechazó la petición al considerar que ese fondo cotizado estaba en contra de las normas que “previenen un uso fraudulento y manipulador” de prácticas bursátiles normales adoptadas para proteger a los inversores y el interés público. La SEC, dice la orden, “hace notar que el bitcóin todavía está en una etapa relativamente temprana en su desarrollo y que, con el tiempo, puede llegar a haber mercados regulados vinculados con los bitcoines de tamaño importante”.