Señor director:
Termina el mes de febrero y quiero aprovechar para referirme a un artículo escrito por el historiador Juan de la Cruz. Es una pieza de colección que retrata la realidad económica del país en los tiempos de la Independencia Nacional.
Me gustó mucho ver la forma sencilla en que se describe el sacrificio de hombres y mujeres para lograr que tengamos un país. Pero sobre todo, pude transportarme a esa época en que el comercio, a pesar de las limitaciones, era la principal actividad.
Otro aspecto a destacar es la forma en que el Padre de la Patria, Juan Pablo Duarte, que era de una familia de comerciantes acomodada, decidió entregarlo todo a cambio de hacer realidad la separación de la parte Este de la isla del régimen haitiano que por 22 años había estado aquí. Fue una proeza que, si lo pensamos bien, debemos reconocer fue un acto que siempre merecerá el reconocimiento de los dominicanos.
Éramos alrededor de 100,000 habitantes y con posibilidades reducidas, pero los hombres y mujeres que creyeron en que sí era posible demostraron que siempre se puede si se quiere.
José Olegario Guzmán.
Abogado.