El Banco Central de la República Dominicana acaba de dar a conocer su informe de crecimiento económico, dando cuenta de que la economía dominicana medida por el Producto Interno Bruto (PIB) creció 7.1% durante el pasado año 2014.
En la presentación del informe, el gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, destacó que ese crecimiento superó en seis puntos porcentuales el crecimiento promedio de América Latina, que fue estimado en 1.1% por organismos internacionales.
Es preciso tomar en cuenta que las estimaciones de los organismos externos generalmente quedan por debajo de lo que finalmente resulta.
Cuando el Banco Central compara el crecimiento “real” de la economía dominicana con el de los países de América Latina, lo que toma son los porcentajes estimados por organismos internacionales en esos países, pues esas naciones todavía no han dado a conocer el crecimiento “real” de sus respectivas economías, como se ha hecho aquí, en un tiempo récord de apenas una semana de haber concluido el pasado año.
Pero en medio de todos los datos ofrecidos por el Banco Central llama la atención el de la inflación medida por el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
La institución monetaria afirma que la inflación (alza de precios) durante el año 2014 promedió 1.58%, muy por debajo, incluso, de su propia estimación para el año que era de 4.5% +/- 1%.
Lo primero a destacar es que el Banco Central tiene como misión fundamental el control de la inflación mediante la toma de medidas monetarias que permitan mantener estabilidad de precios y de indicadores económicos como la tasa de cambio, que influye mucho en el IPC.
Sin embargo, el Banco Central es su vez la entidad que oficialmente mide la inflación en el país, lo cual le convierte en “juez y parte”, ya que ofrece resultados sobre un indicador que él mismo está a cargo de mantener controlado.
En otros países, la inflación es medida por la Oficina Nacional de Estadística. Aquí no. Aquí la mide el propio Banco Central, lo que indica que es muy difícil que ese indicador resulte fuera de los parámetros que se impone como límite la propia institución. Eso hace que la población por lo general no crea en el indicador “frío” que se publica.
Por lo general, la percepción de la gente es que la inflación ha sido mucho mayor a lo indicado por el Banco Central. Eso tiene su explicación en el hecho de que la institución monetaria saca las cifras de un promedio de precios de canastas que incluyen diversidades de bienes y servicios. Al juntarlos todos, el promedio resulta bajo.
Pero cuando se analizan los datos de forma separada se puede observar que el renglón Alimentos y Bebidas No Alcohólicas es el de mayor importancia en la canasta de bienes y servicios calculados para medir la inflación. Ese renglón es el 25.1% de la canasta total, es decir, la cuarta parte de los gastos en que incurre la gente. Incluso, para los quintiles de gente de menos ingresos, ese renglón es mucho más elevado, llegando a ser casi la totalidad de los gastos de una familia.
Pues resulta que es ese renglón el que experimenta mayores niveles de inflación cuando se mide de forma separada. De acuerdo con los cálculos del Banco Central, en 2014, en Alimentos y Bebidas No Alcohólicas, se registró una inflación de 7%, la mayor de todos los bienes y servicios medidos en la canasta.
Es posible que al despejar todos los productos que componen los Alimentos y Bebidas No Alcohólicas, muchos de los más consumidos por la gente hayan aumentado en más de 7%, pero como se colocan agrupados, y se agregan renglones como Bebidas Alcohólicas y tabaco, Vivienda, Salud, Prendas de Vestir y Calzados, Muebles y Artículos para el Hogar, Transporte, Comunicaciones, Recreación y Cultura, Educación, Restaurantes y Hoteles y Bienes y Servicios, entonces el promedio final da un resultado tan bajo y poco creíble como ese 1.58% de inflación que anunció recientemente el Banco Central.
Pero para los fines de medidas oficiales de números “fríos”, ese es el dato: la inflación medida por el IPC en el año 2014 fue de apenas 1.58%, la más baja de América Latina junto con la de El Salvador.