El trabajo que ha hecho el gobierno junto con el sector privado durante todo este proceso de recuperación de la economía es admirable y ha habido un enfoque de apoyo mutuo.
“Es la primera vez que encuentras un Estado trabajando con el sector turismo para el mismo beneficio. Nosotros, sin ese apoyo de vacunación, hubiera sido imposible promocionar la sostenibilidad que tenido República Dominicana y el auge vendrá por esa percepción y ese nivel que hemos logrado en la parte sanitaria”, explicó Jorge Subero Medina, presidente ejecutivo de Cap Cana.
El ejecutivo considera que la promoción del programa de vacunación ha sido fundamental en este proceso, lo cual se ha demostrado con la recuperación del sector turismo. Indicó que el país ha dado muestras de ser eficiente en el control de la pandemia.
En cuando al sector inmobiliario, explicó que el país ha desarrollado una infraestructura que se ha venido trabajando durante muchos años, lo cual ayuda a que se promueva a República Dominicana como un destino para vivir.
Entre las variables que Subero Medina considera que han sido clave para la recuperación económica, está que el país estuvo suplido de todo lo necesario durante los meses más difíciles de la pandemia, pero también los dominicanos contaron con el apoyo del Estado en todo momento. “La comida que se servía para suplir a los turistas fue suficiente para atender la demanda interna y eso ayudó, al mismo tiempo, que la economía se mantuviera estable”, afirma.
De acuerdo con el presidente ejecutivo de Cap Cana, en el caso de los hoteleros hubo muchos que remodelaron sus instalaciones durante el período de cierre, pero también el área inmobiliaria se centró en desarrollar nuevas viviendas.
Destacó el efecto positivo que tuvo en la economía la liberación de aproximadamente RD$215,000 millones del encaje legal, por parte del Banco Central, para mantener el flujo de recursos hacia los sectores productivos. “Todo el que tenía la oportunidad de adquirir una propiedad inmobiliaria pudo acceder a un préstamo con estas facilidades y eso dinamizó la economía”, sostuvo.
A su entender, la Ley de Confotur también jugó un papel preponderante, ya que los que quisieron adquirir una vivienda pudieron hacer uso de este instrumento legal para acceder a las facilidades que ofrece.
Según el ejecutivo de Cap Cana, la promoción turística en estos momentos va lo suficientemente bien, pero entiende que los principales promotores del turismo son los más de diez millones de dominicanos, muchos de los cuales han descubierto que es necesario conocer su país.
Para Subero Medina, el problema de los incentivos a determinados sectores económicos no tiene que ver con el desmonte, sino con la optimización de las regulaciones y permisos, es decir, cómo y dónde se otorgan. Cita, por ejemplo, que el tratamiento fiscal especial que tiene la Ley de Confotur promueve la inversión y el encadenamiento con relación al sector turismo. Aseguró que está demostrado que esta legislación da más beneficios que el sacrificio fiscal que significa para el Estado.
“En el caso del turismo inmobiliario, tú logras que alguien venga a vivir a República Dominicana, permanente o semipermanente y esa convivencia lleva a otros beneficios, como es la compra de vehículos, consumo de combustibles, alimentos, electricidad, telecomunicaciones y genera empleos, los cuales también pagan impuestos”, afirma el presidente ejecutivo de Cap Cana, quien considera que si hay un desmonte de exenciones fiscales en el sector turístico sería parte de una catástrofe (…) y en nada beneficiaría al país.
Puso como ejemplo que si alguien compra un solar de 700 metros cuadrados por US$100,000 y en ese terreno se construye una vivienda de 400 metros, el promedio debe rondar los US$1,000 y los materiales que se adquirieron en el mercado local todos pagan impuestos. En ese sentido, refirió que el Estado apenas exonera el 1% de ese monto. “La carga o ahorro fiscal que tiene el Estado en base a la producción e inversión que está haciendo un inversionista es mínima”, destacó.