[dropcap]E[/dropcap]l “Big Data” consiste en el manejo de grandes volúmenes de información estructurada y no estructurada, que tiene una empresa para convertirla en una ventaja competitiva.
Aplicado a las redes sociales, consiste en la monitorización y medición de los datos que circulan por las redes de la empresa. Aplicado al negocio, podría beneficiar en la mejora de su programa de acción, imagen corporativa, mayor conocimiento del público o reducir costos.
La información es poder, y los datos numéricos de las compañías son esenciales para tomar decisiones y aumentar sus ganancias. Cuanto mayor presencia en redes sociales tenga una compañía, mayores serán los volúmenes de datos a procesar.
En el mundo online, se mueve una inmensa cantidad de información, pero cada negocio decide donde focalizar su atención en base a sus intereses.
Las redes sociales son excelentes herramientas para obtener datos puntuales sobre los gustos y hábitos de los consumidores, ya que hoy en día la clave para conocer a los consumidores está basada en su comportamiento y forma de relacionarse.
El uso de las redes sociales es cada vez mayor a través de los dispositivos móviles, los usuarios están permanentemente conectados, permitiendo acceder a información valiosa de clientes actuales y potenciales, la competencia y tendencias de consumo.
El volumen y la velocidad con la que se generan los datos, y nuestra capacidad para procesarlos, han hecho que se abran un sinnúmero de oportunidades para optimizar las estrategias de las empresas, y tomar decisiones.
Las empresas pueden aprovechar el “Big Data” utilizando la información que se recolecta de sus clientes a través de las redes sociales para gestionar crisis y sentimientos hacia la marca, realizar acciones de venta directa y atención al cliente de manera proactiva, optimizar la estrategia de contenidos y mejorar la relación con ellos.
Cuanta mayor información tengamos sobre los clientes, mayores serán las posibilidades de darle un mejor servicio, en muchos casos personalizados, adelantándose a sus necesidades, ofreciéndoles productos y servicios justo a la medida.
Para aplicar el “Big Data”, las empresas deben invertir dinero en equipos tecnológicos, como centros de datos en los que se almacene la información, y programas para sacar valor a esos datos. Muchas compañías hacen uso del “Big Data” para mejorar su posición. Google, Apple, eBay, Netflix, Procter & Gamble, entre otras.
El reto está en desarrollar la capacidad para impactar sobre la oferta adecuada en el momento preciso. Más que una herramienta, el “Big Data” es una nueva forma de gestionar el negocio, en un mundo donde todo cambia en un segundo.