España fue en noviembre el tercer país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con el aumento interanual de precios más limitado en la energía, lo que contribuyó a que su inflación general, del 6.8% ese mes, fuera de las menores de la organización, netamente por debajo de la media del 10.3%.
La OCDE que publica este martes los datos de la inflación de noviembre, destaca en un comunicado que esa media del 10.3% es cuatro décimas inferior a la de octubre por la energía, que se desaceleró.
La inflación de la energía en los 38 países miembros se quedó en el 23.9% en noviembre después del 28.1% en octubre, y ése fue el nivel más bajo desde septiembre de 2021.
En España, los precios de la energía aumentaron un 4.5% entre noviembre de 2021 y noviembre de 2022, un incremento interanual claramente inferior al que se había constatado en octubre (8%).
En noviembre, solo tuvieron cifras inferiores a la de España México (2.4%) e Israel (4.4%). Fueron superiores al 10% en 34 países e incluso superior al 30% en 14 de ellos. El récord lo marcó Turquía, con un 137.1%, pero también fueron particularmente elevadas las de Holanda (99.8%), Italia (71.1%) o Bélgica (63%).
Los alimentos volvieron a ser otro de los factores más inflacionistas, con un incremento medio interanual del 16.1% en el conjunto de la OCDE en noviembre, como en octubre.
La inflación de los alimentos en España (15.3%) se quedó en noviembre ligeramente por debajo de esa media, y también de la de la zona euro (16%).
En cuanto a la inflación subyacente, que excluye los elementos más volátiles que son la energía y los alimentos, en el caso de España fue del 4.1% en noviembre, comparada con el 7.5% en toda la OCDE y con el 5% de la zona euro.
La inflación global en España en noviembre, del 6.8%, fue superior a la de Suiza (3%), Japón (3.8%), Corea del Sur (5%), Israel (5.3%), Luxemburgo (5.9%), Francia (6.2%) y Noruega (6.5%).