Es imposible referirse a seguridad alimentaria y nutricional sin inocuidad de los alimentos. Cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que cada año se pierden US$110,000 millones en productividad y gastos médicos a causa de comestibles insalubres en los países de ingresos bajos y medianos.
Detalla que anualmente se estima que unos 500 millones de personas, es decir, uno de cada 10 habitantes, se enferma por ingerir alimentos contaminados y unos 420, mueren por esa misma causa. Los infantes menores de cinco años son los más afectados, al representar el 40% de las enfermedades por alimentos mal lavados o tratados.
“Más de 200 enfermedades están causadas por ingerir alimentos contaminados con bacterias, virus, parásitos o sustancias químicas como los metales pesados”, destaca el organismo internacional a propósito de celebrarse este 7 de junio el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos.
En República Dominicana, consiente de esa realidad, el Estado a través de varias entidades públicas como el Instituto de Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (ProConsumidor), ejecuta acciones puntuales y tiene a disposición la Guía Básica de Inocuidad de los Alimentos , con el objetivo de orientar a la población local sobre el manejo adecuado de los productos alimenticios.
En ese sentido, el director de la entidad, Eddy Alcántara, ve necesario crear una cultura de seguridad alimentaria en toda la población nacional para que adopte prácticas seguras a través de claves de limpiar, separar, cocinar y refrigerar, para preservar la salud de los consumidores.