Nueva York.- La comunidad dominicana en Nueva York se prepara para lo peor. Le tomaron la palabra al alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, quien advirtió a los neuyorquinos estar listos y abastecerse para con miras a resistir los días difíciles que pudieran venir tras la tormenta de nieve que azotará el nordeste de Estados Unidos.
Miles de dominicanos abarrotaron este domingo los supermercados y bodegas de Manhattan, El Brox y otros condados de la ciudad Nueva York, pues se prevé que la tormenta afecte la ciudad durante dos días. Las autoridades esperan que los efectos sean tan graves como jamás se habían visto en la ciudad.
Según reportó el colaborador de elDinero en Nueva York, Joel Alcántara, se prevé que la tormenta sea una de las más grandes en la historia de ese estado y de toda la zona nordeste de Estados Unidos. Según dijo, De Blasio pidió a los residentes prepararse para recibir más de 90 centímetros de nieve desde la tarde este lunes y madrugada del miércoles.
Cual si fueran las medidas previsoras ante un ciclón en República Dominicana, los dominicanos se abastecen de los principales productos de consumo masivo, a fin de no tener que salir en medio de la tormenta de nieves anunciada por las autoridades como sin precedentes. “Esperamos tener un serio problema en nuestras manos”, dijo de Blasio en una rueda de prensa convocada especialmente este domingo para emitir la advertencia sobre el clima. “Los neoyorquinos no deben de subestimar esta tormenta”, afirmó el alcalde, según reportó excelsior.com.mex en su sitio web.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) elevó la tarde de este domingo una observación de ventisca invernal a una advertencia de tormenta para la costa noreste de Estados Unidos desde Nueva Jersey hasta la frontera con Canadá, incluyendo las ciudades de Nueva York y Boston.
Se espera que la tormenta cree condiciones de borrasca de nieve para Nueva York y otras partes del noreste de Estados Unidos, amenazando con paralizar una de las áreas más habitadas y transitadas del país, al cancelar y retrasar miles de vuelos y obligar al cierre de cientos de oficinas, centros de trabajo, escuelas y demás.
El presupuesto asignado a la ciudad es de US$70,000 millones, lo cual corresponde a la mayor cantidad de cualquier otra alcaldía de Estados Unidos y del mundo, superando incluso a países como Suiza o Israel. La ciudad emplea a 250,000 ciudadanos, y destina en torno a US$15,000 millones a la educación de 1.1 millones de niños.