La población de República Dominicana para este año es de 10,448,4999 personas, de las que 2,729,035, es decir el 26.1%, son jóvenes que tienen entre 15 y 29 años de edad, según las proyecciones de la Oficina Nacional de Estadística (ONE).
El padrón que la Junta Central Electoral (JCE) utiliza para las votaciones congresuales y municipales de este año tiene a 7,487,040 inscritos, de los que 1,327,720 tienen entre 18 y 25 años y 889,516 entre 26 y 30.
Es decir, que un total de 2,217,236 sufragantes, equivalente al 29.6% de los inscritos en el padrón, tienen menos de 30 años. Son jóvenes. Muchos están en las universidades, en el mercado de trabajo, o buscan empleos, etc.
De modo que los jóvenes tienen la palabra por derecho propio y la sociedad no debe sentirse amenazada o alarmada porque decidan manifestarse frente a la Junta Central Electoral (JCE) para demandar comicios transparentes y una ejecución más justa de los aportes de los contribuyentes que se utilizan para elaborar el Presupuesto Nacional.
Que los jóvenes se interesen por el presente y el futuro del sistema democrático de República Dominicana trae esperanza y obliga a los mayores a actuar con mayor responsabilidad. Debemos cuidarlos y garantizarles seguridad para que se manifiesten en orden y sin ningún acto de violencia que los ponga en peligro. No pasa nada. Son jóvenes creativos y en muchos casos irreverentes, como su naturaleza. Solo debemos escucharlos y establecer canales de diálogos amigables que nos lleven a construir un futuro de mayor bienestar para todos.