Es un hecho. Las fuerzas disruptivas del fintech están presionando por un rediseño de los modelos tradicionales de la banca. Esto aunado al empoderamiento de los consumidores en sus decisiones de cómo, cuándo y dónde adquirir productos y servicios, está continuamente cambiando el modus operandi de la industria financiera a nivel mundial.
Podríamos decir que existen tres drivers clave que están acelerando la evolución de fintech. Primero, los avances tecnológicos en materia de inteligencia artificial, el cloud computing, Blockchain, y aprendizaje automático. En la actualidad, los consumidores están utilizando estas nuevas tecnologías para realizar pagos y gestionar su dinero.
Estamos presenciando una transición del modelo tradicional de la banca hacia otro, que básicamente le hace la vida más fácil a las personas a través de la digitalización de los servicios financieros.
Segundo, el comportamiento del consumidor moderno, en concreto, la generaciones X, Y, y Z, muestran una clara preferencia por el uso del fintech para administrar una gran parte de sus patrimonios. Otro driver que está propulsando al fintech es la facilidad de obtener y otorgar financiación de forma no centralizada o directa. Algunos ejemplos de productos que han surgido a raíz del fintech son el peer to peer lending y el crowdfunding, entre otros.
Por supuesto, en República Dominicana también se viene desarrollando esa revolución tecnológica desde hace ya varios años. Incluso, ya contamos con Adofintech, la primera asociación dominicana de empresas de fintech. En la actualidad, se encuentran operativas más de 50 empresas fintech enfocadas en las áreas de sistema de pagos y remesas, finanzas personales, gestión financiera corporativa, y crowdfunding, entre otras.
Algunos datos clave que apuntan a un incremento de la digitalización de servicios financieros en República Dominicana son la reducción de sucursales bancarias y un mayor uso de los sistemas de pagos digitales. Además, las fintech fomentan la inclusión financiera a través del uso de medios digitales para ofrecer sus servicios.
En fin, las empresas fintech son aliadas de los bancos tradicionales, ya que trabajan en conjunto para brindar una mejor experiencia al cliente.