[dropcap]U[/dropcap]na empleada del Banco Peravia desveló que la Superintendencia de Bancos (SIB) tenía conocimiento del fraude perpetrado por ejecutivos de la entidad, y que éstos enviaban dinero a un trabajador de la institución reguladora por medio de un mensajero.
Estas afirmaciones figuran en la transcripción del interrogatorio que la fiscal Yeni Berenice Reynoso hizo a la secretaria Natacha Gabriela González Castillo, asistente del presidente del Banco, José Luis Santoro, quien se encuentra prófugo.
Según su testimonio, el vicepresidente del Banco, Gabriel Jiménez Aray, y que también está huido de la justicia, ordenó la entrega de 200,000 pesos a un empleado de la Superintendencia Iromi Castro, y dijo que se justificara esa cantidad en concepto de gastos.
La representante legal del imputado Carlos Serret, Ingrid Hidalgo, dio a conocer a la prensa el contenido de los interrogatorios que desvelan que en la Superintendencia de Bancos eran conscientes de la quiebra del Banco Peravia y que un ejecutivo del organismo supervisor recibía dinero.
“Los interrogatorios fueron anexos a las medidas de coerción, y en ellos sale a relucir que una de las que laboraba como asistente para Santoro declaró que éste le dijo que 200,000 pesos que mandó con un mensajero eran para los empleados de la Superintendencia de Bancos, eso está ahí”, indicó.
En la transcripción de los interrogatorios figura el pago de entre 200,000 y 300,000 pesos en efectivo en concepto de intervención de teléfonos.
Además, según la declaración de la secretaria, en el Banco Peravia era costumbre a tomar dinero sin autorización de los clientes titulares de las cuentas y, para ello, el presidente y el vicepresidente hablaban con ejecutivos de la entidad que procedían a hacer la retirada de efectivo.
Hoy se dará a conocer la decisión de la Tercera Sala Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional sobre un recurso de amparo interpuesto por tres implicados en el fraude del Banco, que cumplen seis meses de prisión preventiva.