Con la pandemia del covid-19, la banca tuvo un acelerado crecimiento en la adopción de sistemas de pagos electrónicos, que permitan a los usuarios cumplir con el distanciamiento social y agilizar los servicios bancarios.
Ahora, el sector financiero buscará que otras entidades de intermediación financiera y consumidores, a través de la implementación de nuevas tecnologías, sean parte del cambio digital que conecta a agentes de servicios y usuarios en un solo entorno virtual.
Pero antes se necesita impulsar la inclusión financiera. Así lo refleja el Estudio Microscópico Global 2020, que arrojó que el 53.68% de la población dominicana no tiene ningún producto financiero, ni de ahorro, ni de crédito. La investigación asegura que la inclusión financiera está garantizando que los consumidores en áreas remotas y de bajos recursos cuenten con acceso a servicios financieros digitalizados, a través de plataformas como tPago.
“La inclusión financiera es cuantitativa y cualitativa, no se trata de dinero en manos de población vulnerable, sino que se debe garantizar que los servicios bancarios sean accesibles a la población”, asegura la directora regional de negocios de GCS, Marlenne Then.
En adición a lo anterior, la inclusión financiera resalta entre los beneficios que se pueden obtener de la sinergia entre el sistema financiero tradicional y el mercado de las empresas fintech, contrario a otros paradigmas que los contraponen como competencia.
Mercado digital en República Dominicana
Uno de los objetivos del mercado financiero digital es la reducción de pagos en efectivo. Un estudio realizado por Mastercard New Payments Index 2021, arrojó que el 71% de las personas esperan usar menos efectivo en el futuro, y República Dominicana no está ajena a esta situación.
En el marco del Fintech Market 2021, celebrado por la La Asociación Dominicana de Fintech (AdoFinTech), Then afirmó que los usuarios tradicionales deben ver la trazabilidad de sus transacciones al momento de usar servicios digitales para sentirse seguros en el entorno virtual. Sostuvo que las entidades financieras deben crear plataformas digitales de pasos versátiles y fáciles que otorguen al usuario una experiencia de acceso segura.
“Todo eso se logrará cuando el país tenga un enfoque financiero digital conveniente para las clases sociales”, sostuvo.
La experta informó que durante la pandemia se realizaron más de tres millones en transacciones digitales por tPago, una aplicación que da pasos pequeños a la inclusión digital en lugares con escasos accesos tecnológicos, ya que cuenta con un sistema de mensajería que no requiere conexión a datos de internet, donde se puede realizar desde una transferencia bancaria hasta el pago de una factura.
“La ventaja de tPago es que no requiere de un teléfono inteligente, solo es marcar *150# desde el celular para desplegar un menú de opciones y que, en el tiempo que dura la transacción, no consume datos móviles”, explicó la experta de negocios.
Resaltó que a la banca digital dominicana aún le falta camino por recorrer. “La digitalización no se va a lograr tan rápido. En otros países se habla de conexión 5G, nosotros aún tenemos conexión 2G y 3G, estamos limitados”, agregó.
Puntualizó que, debido a las limitaciones tecnológicas con las que cuenta el país, los subagentes bancarios permiten a las personas iniciarse en la adopción de billeteras tecnológicas.