Este martes 8 de marzo, en el marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer, el diputado Omar Fernández presentó una propuesta de eliminación de impuestos a las toallas sanitarias, conocido en el mundo como “tasa rosa” (del inglés pink tax). Se trata de un costo adicional de productos cuando son destinados a mujeres.
El proyecto, además de buscar que el acceso a este producto sea menos costoso para las féminas, propone categorizarlo como de primera necesidad, porque como explica en un comunicado de prensa “ninguna mujer usa toallas sanitarias por gusto, es una necesidad fisiológica”.
De acuerdo al legislador, por concepto de toallas sanitarias el Estado recauda un promedio de RD$1,000 millones en impuestos, tomando en cuenta que, según un sondeo realizado por elDinero, los precios oscilaban entre RD$75 y RD$145 a octubre del 2021.
En 2021, un estudio realizado por Iniciativa de Empoderamiento de la Mujer reveló que un 20% de niñas y adolescentes dominicanas no asiste a clases en las escuelas por falta de toallas sanitarias, mientras que otro 4.6% de las alumnas falta cuatro o más días a la docencia mensual por lo difícil que les resulta encontrar este producto de higiene personal.
Eso se suma al informe realizado por Oxfam en el que se destacaba que las mujeres en República Dominicana, entre otros países, están en una posición de desventaja frente al pago de impuestos, y también reciben menos beneficios públicos de los que deberían a través del gasto de los gobiernos.
Impuesto rosa en Latinoamérica
En el 2018, Colombia se convirtió en el primer país de América Latina en quitar el impuesto agregado a las toallas higiénicas y a los tampones. La Corte constitucional declaró que no se pueden gravar esos productos porque son insustituibles y el costo extra va contra la igualdad de género, por lo cual se suprimió el impuesto del IVA -de valor añadido-.
A la República Dominicana le podría esperar un largo camino a recorrer si la propuesta sigue adelante. La decisión en Colombia llegó tras varios años de la campaña Menstruación Libre de Impuestos, realizada por mujeres activistas que ya en 2016 habían impulsado la disminución del impuesto del 16% al 5%.
En México, el Congreso aprobó la tasa 0% del IVA a productos de gestión menstrual en la Miscelánea Fiscal 2022. Eso significó que desde el primero de enero no se paga el 16% del IVA en las toallas sanitarias, tampones y copas menstruales en esa nación.
La aprobación de la medida fue resultado de la demanda de colectivos, el apoyo de organizaciones no gubernamentales y legisladoras.
En Ecuador, desde diciembre del 2021 los artículos de higiene femenina no pagan el Impuesto al Valor Agregado (IVA), tras entrar en vigencia la reforma tributaria que eliminó el impuesto del 12% a estos insumos. Otros artículos que se vieron beneficiados fueron pañales desechables populares, mascarillas, oxímetros, el alcohol y el gel antibacterial superior al 70% de concentración. Los cuatro últimos productos tomaron relevancia durante la pandemia de covid-19, donde su precio se disparó. Hasta el momento esos son únicos tres países de Latinoamérica que eliminaron la denominada tasa rosa.
En el resto del mundo
En Estados Unidos, a junio del 2021, al menos 12 estados habían tomado medidas formales para eliminar el impuesto estatal a productos femeninos. Los legisladores en al menos 20 estados introdujeron legislación y unos 28 estados todavía tenían impuestos relacionados con la menstruación en los libros.
En Canadá, el gobierno prohibió el GST (impuesto sobre bienes y servicios) a los artículos de higiene femenina, incluidos los tampones desde el 2015. El pink tax también desapareció de Reino Unido y Gran Bretaña tras eliminarse el 5% del impuesto al valor agregado (IVA) sobre los productos menstruales.
Kenia eliminó el impuesto a los tampones y ahora proporciona productos menstruales a niñas en edad escolar. El mismo panorama se vive en la India, donde se quitaron luego de las activistas presionar en su contra durante más de un año. Francia y España están en esta lista.