[dropcap]C[/dropcap]omo cualquier otro negocio, la intermediación financiera cuenta con precios que condicionan las decisiones de los agentes y que permiten la obtención de ganancias. En este caso, se trata de las tasas de interés, o precio del dinero, que pueden ser activas o pasivas.
La actividad de los bancos consiste en la captación de recursos en forma de ahorros que luego son ofertadas a quienes necesitan liquidez en forma de préstamos.
Para despertar el interés de los ahorrantes, los bancos y demás entidades de intermediación financiera utilizan las tasas de interés pasivas, es decir, el precio que pagan a los ahorrantes para que se animen a sacar su dinero de debajo del colchón y llevarlo a sus “bóvedas”.
Las tasas activas son los precios que pagan las familias, empresas o Estado para tener acceso a los recursos disponibles en los bancos. La diferencia entre unas y otras tasas son los beneficios que genera el negocio.
Durante el último mes de 2015, los depósitos a un año costaban a los bancos 6.92% en promedio, mientras que pagaban 7.47% por los ahorros a más de un año. Su margen en comparación con el 10.29% que cobran por los préstamos a las viviendas fue de 3.37 y 2.47 para los ahorros a un plazo de un año y plazos superiores, respectivamente.
El dinero costaba al comercio 12.96% en promedio durante diciembre pasado. El margen en relación con la tasa pasiva a un año fue de 6.04 puntos porcentuales, mientras que para los depósitos superiores a un año fue de 5.49%.
El financiamiento anual de las tarjetas de crédito es el que más ganancias produce a los bancos. La tasa que pagaron los consumidores en diciembre fue de 59.68%, una diferencia de 52.76 puntos porcentuales en relación con los depósitos a un año y de 52.21% para los plazos superiores.
En el caso de los demás préstamos, cuya tasa era de 17.74%, el margen fue de 10.82 en relación con los depósitos a un año y de 10.27% para plazos más largos.
Para regular los precios del mercado de manera que se pueda contar con una economía sana, la entidad supervisora de cada país utiliza sus tasas de políticas, con la cual dicta las tendencias que considera son las más oportunas. En el caso dominicano, está el Banco Central.
Política
A finales de marzo de 2015, la Junta Monetaria redujo significativamente la tasa de política en 50 puntos básicos, fijándola en 5.75% luego de permanecer en 6.25% desde agosto de 2013.
Pero esta reducción de marzo no fue suficiente, puesto que al mes siguiente el Banco Central consideró oportuno un nuevo ajuste de otros 50 puntos básicos, colocando la tasa de política monetaria en 5.25%. Otra bajada de 25 puntos se hizo efectiva al mes siguiente, lo que fijó la tasa en 5% desde finales de mayo.
Legislación
El principal objetivo de la política monetaria del Banco Central, según el propio organismo, es la estabilidad de precios, como lo establecen la Ley Monetaria y Financiera 183-02 y la Constitución dominicana.
En tres meses, el interés de referencia para las entidades de intermediación se redujo el año pasado de 6.25% a 5%, un descenso de 125 puntos básicos, lo que refleja una política expansiva para mantener el ritmo de crecimiento de la economía.