Hay quienes se preguntan si es conveniente tomar prestado en momentos en que están subiendo las tasas de interés en los bancos.
La pregunta no deja de tener sentido, aunque es preciso considerar que no se trata de si el rendimiento del crédito es alto o no, sino de si usted necesita o no tomar un préstamo en este momento y si tiene la capacidad para pagarlo.
Las compras no deben realizarse por el hecho de que el artículo esté en oferta. Lo ideal es comprar el artículo cuando usted lo necesita, independientemente de su precio.
Lo mismo pasa con los préstamos. Suponga que usted va a comprar una casa de 3 millones de pesos. Ya usted ahorró 1 millón para el inicial y debe financiar 2 millones. En este momento usted tiene un buen empleo y su salario le alcanza para pagar las cuotas.
Entonces, en ese caso, aunque las tasas estén subiendo, usted debe contratar el préstamo, pues lo necesita y tiene fuentes para pagarlo.