A propósito del caso judicial conocido como Operación Calamar, la juez a cargo de la audiencia de medida de coerción, Kenya Romero, reenvió la audiencia para el domingo 26 de marzo, con lo que evitó que el proceso coincidiera con la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado que se realizó en República Dominicana los días viernes 24 y sábado 25.
El domingo, a media mañana, aunque no haya sido con esa intención, la magistrada hizo bien en reenviar la causa para el miércoles 29, lo cual daría más cobertura a la Cumbre en los titulares de periódico del lunes 27.
Pero no fue así, pues el opositor Partido de la Liberación Dominicana (PLD) estaba en actividad de rechazo al sometimiento de sus miembros en el caso Calamar y fueron innecesariamente agredidos por la Policía Nacional con gas lacrimógeno en la sede de esa organización. ¿Resultado? La atención se enfocó en esos hechos, quedando la Cumbre en un segundo plano.