[dropcap]L[/dropcap]os candidatos a la Gobernación de Puerto Rico se mostraron de acuerdo con la presencia de la Junta de Supervisión y Manejo Fiscal designada por Washington, DC, como medio para solucionar la crisis que afecta a la isla caribeña, pero mostraron diferencias en los objetivos finales y en los mecanismos de negociación.
Caribbean Business y ABC5 fueron anfitriones de “Junteconómico” un debate entre los candidatos a la Gobernación que se enfocó únicamente en el tema de la economía.
El candidato a la gobernación del Partido Nuevo Progresista (PNP), Ricardo Rosselló, consideró que el Congreso de Estados Unidos tomará acción antes de que finalicen los fondos de salud otorgados por el programa federal Obamacare, que expiran el año próximo.
Esa acción también se extendería al Negociado de Rentas Internas federal (IRS, en inglés), que deberá decidir si permite que un grupo de compañías deduzcan de sus impuestos federales lo que pagan en Puerto Rico bajo la Ley 154, conocida como el arbitrio a las empresas foráneas.
Por su parte, el candidato a la gobernación del Partido Popular Democrático (PPD), David Bernier, apostó a la negociación con el Congreso y a dirigir “todos los esfuerzos” a mejorar el problema de la salud en el país.
Recomendó solicitar la aprobación de las enmiendas al Código de Rentas Internas federal para incluir la sección 245A, que reduce en 85% el impuesto sobre la repatriación de ganancias de corporaciones estadounidenses.
Si esto no ocurriera, “tendríamos que seguir trabajando para generar competitividad en el sector industrial, sobre todo en la manufactura de alta tecnología”.
El candidato independiente Manuel Cidre, recomendó “no poner todos los huevos en una misma canasta”, en referencia a la dependencia de legislación federal para los fondos de Obamacare o la extensión de la deducción del dinero que se le cobra a las empresas foráneas.
Partido del Pueblo
El candidato a la gobernación del Partido del Pueblo Trabajador (PPT), Rafael Bernabé, apostó a la negociación de un “proyecto de desarrollo económico que permita que Puerto Rico adquiera una economía que no necesite ningún subsidio y que precisamente satisfaga nuestras necesidades”.
Es una herramienta similar a lo que fue en la década del 1930 el Puerto Rico Reconstruction Administration, una entidad “financiada con fondos federales que tenía como objetivo hacer una reforma agraria en Puerto Rico.