[dropcap]H[/dropcap]a sido mucha la incertidumbre, las necesidades de estudiar al consumidor de estos tiempos, y las preocupaciones por el ¿Qué pasa? ¿Se hace fiel la gente a las marcas? ¿Son aún las marcas parte de la vida de la gente? ¿De dónde sale el boom de las marcas blancas? ¿Ha perdido la gente la fe en la publicidad?
Lo cierto es que el mundo, una que otra vez nos da sorpresas, y las sorpresas son cada vez más grandes y en apenas segundos. El patrón social le ha cambiado a la gente en un cien por ciento. Las sociedades están en medio de grandes transformaciones. Los escenarios económicos del hombre han cambiado.
Desde hace quince años la gente se está acostumbrando a vivir en medio de la crisis. Los escenarios políticos y religiosos están cambiando por igual; el liderazgo empresarial es cambiado y las plataformas de vida se han modificado en perspectiva.
El ser humano es capaz de adaptarse a distintas situaciones en el plano físico, sicológico y emocional, y cada una de las menciones que hemos hecho anteriormente juega un papel importante en los sentidos de la gente.
La plataforma de vida útil digital, la net, brinda un vehículo a través del cual el individuo puede alcanzar grandes velocidades al momento que quiere saber más o mejor acerca de algo; un tema en común que puede ir desde el análisis de una oferta, hasta crearse una opinión de un tema de importancia mundial en muy poco tiempo.
A la gente le ha pasado mucho en un corto plazo, y aunque crecen cada vez más las ofertas, y se amplían los escenarios de consumo, cada vez es más difícil que las empresas ofrezcan resultados interesantes para los accionistas al presentar sus estados semestrales.
Los departamentos de mercadeo han tenido que adentrarse en un sin número de acciones de compromisos para tratar de no solamente atraer más clientes, sino mantenerlos con ellos.
Los programas de fidelización antes eran más comunes en líneas aéreas, hoy día, desde las farmacias, hasta las estaciones de expendio de combustibles necesitan ir más allá del simple hecho de servir un buen producto, a un precio razonable y de manera cómoda y segura.
Necesitan dar y dar haciendo entender que no esperan nada a cambio, que no sea tu visita cada día, querer escucharte y otros discursos más del marketing.
Quizás todo esto ha promovido una nueva especie de consumidores en el mundo, consumidores que no les importa mucho lo que le digan, y que quieren poco compromiso con las marcas y los productos, aventurándose a consumir a partir de la necesidad que tengan en el momento.
Teniendo la libertad de cambiar sin darle mayor valor a un “brand package” o a una nueva marca con un nombre corto y fácil de memorizar. Esto pudiera responder la explosión de las marcas blancas por el mundo, el cambio de liderazgo, y otros acontecimientos que estamos viendo marcar el mundo del marketing y más tarde la publicidad.
Es muy probable que el hombre haya comenzado a comprar a partir de sus propias conclusiones, entendiendo el ahora y su hoy, donde ha muerto casi por completo el hecho de la compra por impulso.
Amazon nos ayuda a entender un poco mejor este postulado. Aquel que entienda que debe vender todo y en todos los escenarios, y con todas las partidas que busca el consumidor; ese ganará adeptos, pero serán fieles solo a las ofertas, y estarán dispuestos a cortarle la cabeza a cualquier marca.