Este 2021 habrá de ser recordado por haber marcado la raya del antes y el después de la pandemia. La recuperación de la economía comenzó en febrero con el refrescante 1.8% que inyectó optimismo y, por qué no decirlo, trajo un aire positivo en el panorama que durante tantos meses, específicamente desde hacía casi un año, transitaba por terreno negativo. En marzo hubo un pequeño salto de 10.6%.
Sin embargo, abril sí que trajo lo que todos, de alguna manera, deseábamos desde hacía mucho tiempo. En este mes se registró un increíble y espectacular crecimiento de un 47.1%, lo que no puede ser considerado como un rebote, ya que cuando se compara con el mismo mes de 2019, que sí fue un año normal, el resultado es positivo.
En este proceso de recuperación hay más de un protagonista. La tasa de interés, por mucho, ha desempeñado un papel fundamental si se toma en cuenta cómo se ha comportado el crédito al sector privado en moneda nacional, el cual ha crecido en más de un 9.2% de forma interanual.
La provisión de liquidez en moneda nacional ha sido de RD$215,000 millones, equivalentes al 5% del producto interno bruto (PIB). Y es bueno que conste en acto: RD$81,327.9 millones han sido canalizados a actividades productivas relacionadas con el comercio y las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes). Como dato adicional, las exportaciones de zonas francas crecieron un 108.1% interanual.
Al efecto de la tasa de interés es preciso agregar otras patas que también han logrado cuadrar la mesa. Se trata de las remesas, las cuales experimentaron un crecimiento interanual de un 130.6%.
Este importante flujo de divisas por remesas y exportaciones de zonas francas ha contribuido a la estabilidad cambiaria, de tal manera que al 24 de mayo el peso dominicano exhibe una apreciación de 2.2 %, contrario a lo observado en las monedas de la mayoría de países de Latinoamérica. Asimismo, el incremento en el flujo de divisas ha permitido la acumulación de reservas internacionales, las cuales alcanzaron US$12,306 millones al 24 de mayo, equivalentes a 7.4 meses de importaciones y 14.7 % del PIB.
Como colofón para el optimismo, porque no hay otra manera de llamarlo, está lo que ha señalado el Bank of America, el cual aumenta su proyección de crecimiento para República Dominicana de 7.9% a 10.0% para 2021. En este caso, el Banco Central dominicano es más conservador y se mantiene en torno al 8%.
Aunque aún está en terreno negativo, pero en franca recuperación, el turismo comienza a levantar las alas. La llegada de pasajeros alcanzó 1,044,159 turistas en enero-abril 2021, mientras que la inflación acumulada se sitúa en 2.69% en este período y en 9.65% de forma anualizada.
Los datos oficiales establecen que mayo se han canalizado 90,000 nuevos préstamos por medio de los intermediarios financieros para un total de RD$192,672 millones a empresas y hogares. ¿Qué quiere decir esto? Que vamos bien.