El fin de semana pasado, sufrimos los efectos del Ciclón Fiona, el cual no supero la categoría 1, trayendo muchas lluvias. A pesar de no ser un ciclón de grandes vientos, ocasiono muchos danos, e inundaciones; No hubo pérdidas humanas. En cuanto a los seguros, podemos decir que son muchas las pérdidas que no tienen coberturas, y las que, si tienen coberturas, los danos no fueron considerable que superen el deducible que generalmente tienen las pólizas para los riesgos catastróficos del 2% del valor asegurado de la propiedad afectada.
Un elemento para tomar en cuenta es lo renuente que son los clientes, para ajustar cada año, los valores de los bienes asegurados, lo que crea dificultad a la hora de establecer una indemnización por uno de los riesgos asegurados. Esto porque las aseguradoras aplican una fórmula de tres elementos. Valor asegurado entre el valor de mercado de la propiedad contra el monto de la pérdida y al resultado, se le descontara el deducible catastrófico.
Necesitamos elevar la conciencia de la población sobre la importancia de los seguros. Cada vez los riesgos que afectan las inversiones son mayores, y la falta de seguro nos crea una inseguridad para mantener los empleos y la producción como los servicios que requiere el mercado. Es una tarea pendiente del supervisor, las aseguradoras e intermediarios. Y estamos ante una buena justificación para llevar a nuestra población la comprensión, sobre todo aquellos que mas tienen que perder, teniendo la alternativa de transferir el riesgo que no pueden eliminar, por una prima soportable.
Fiona solo fue un buen susto, y el clima cada vez es menos predecible, ante la certeza de que cada año tenemos las amenazas sobre nuestras vidas y bienes, y la brecha que tenemos que cubrir es enorme. Solo deben tomar en cuenta que, a pesar del crecimiento constante por más de 20 años, no llegamos ni al 2% de PIB como prima, donde la peor parte la llevan los riesgos de Incendio, Terremoto y ciclón. Y no olvidemos, que otros riesgos crecen con una intensidad amenazadora.
Es importante tomar en cuenta, que el incremento de clientes es vital para que la subida de las primas no sea insostenible, como supongo que serán, con la elevada siniestralidad catastróficas que trae el calentamiento global y otras pérdidas como la de vehículo, vida y los delitos cibernéticos. La reducción de la brecha nos disipa el riesgo con un volumen mayor de prima, como he explicado otras veces en relación con el ramo de vehículo. Si todos los vehículos estuvieran asegurados, tendríamos un volumen de prima mayor, pero los siniestros serian la misma cantidad, ya que actualmente los siniestrados son los no asegurados y los asegurados por igual.
Los ciclones seguirán pasando, como los temblores acechan cada día bajo el sol, en su misma trayectoria, como decía Don Pedro Mir. Necesitamos crear ahorros Y reservas, para las grandes calamidades que la naturaleza, ante su infinita paciencia, nos tienes reservado, donde Dios, no tendrás excusas para evitarnos, por nuestros grandes pecado.