La salud financiera del presupuesto ha ido de mal en peor en los últimos ocho años, a pesar de las reformas fiscales y/o tributarias y del aumento de los ingresos respecto al producto interno bruto (PIB). Los números establecen que de nada han servido la entrada de más recursos por recaudaciones. Los esfuerzos y promesas de los gobiernos por controlar el gasto no han pasado de ser intenciones. En la práctica todo ha ido en vía contraria.
El pago de intereses del gobierno central respecto a los ingresos ha ido en aumento. Entre enero y julio de este año fueron erogados RD$35,435 millones por este concepto, frente a RD$27,094 millones en igual período de 2012, lo que representa un 30.78%, equivalentes a RD$8,341 millones adicionales.
En 2005, según datos de la Dirección General de Crédito Público, los intereses representaron el 6.4% de los ingresos, mientras que al cierre de 2012 ya su ponderación cerró en 17.7%, para un aumento de 11.3 puntos porcentuales. Todo esto sucede a pesar de que el presupuesto pasó de RD$160,152 millones a RD$530,000 millones en este período, un 231%.
En este año, con excepción de marzo y junio, todos los meses han sido superiores en comparación con 2012 en cuanto al pago de intereses. En enero pasado el gobierno pagó RD$7,193 millones, mientras que igual mes del año anterior fueron RD$5,299 millones. En febrero el pago fue de RD$2,520 millones, frente a los RD$704 millones de igual período de 2012.
En marzo, una de las excepciones respecto a 2012, el pago por concepto de intereses fue de RD$2,064 millones, mientras que en igual período del año anterior fueron RD$3,078 millones. En abril se pagaron RD$5,096 millones, frente a RD$3,238 millones en igual período del año anterior. En mayo también fue mayor, pues fueron RD$4,556 millones frente a RD$3,431 millones. En junio quedó ligeramente por debajo este año al pagarse intereses por RD$7,279 millones, en comparación con los RD$7,325 millones en igual mes de 2012.
El peso de los intereses en los ingresos del gobierno se acentuó en julio pasado cuando se debieron pagar RD$6,726 millones, un poco menos que en junio de este año y 2012, pero muy por encima del mismo período de 20912 cuando fueron RD$4,020 millones. Estos datos demuestran que el crecimiento de la deuda ha sido mayor al aumento de los ingresos durante los últimos ocho años.
Un análisis del Centro Regional de Estudios Económicos Sostenibles (CREES), que firma el asistente de investigación Rafael Fornet, señala que la deuda pública consolidada de República Dominicana representa a julio del 2013 alrededor de US$35,185 millones. Este monto se compone de US$22,186 millones correspondientes a deuda del Sector Público No Financiero (SPNF) y US$12,999 millones del Sector Público Financiero (SPF), este ultimo integrado por el Banco Central, el Banco de Reservas, el Banco Agrícola y el Banco Nacional de la Vivienda y Fomento de la Producción (BNV).
Destaca que desde diciembre de 2005 a julio de este año, la deuda del SPF se ha incrementado en US$5,740 millones, lo que representa un incremento de 79%. Mientras, la deuda del SPNF desde diciembre de 2005 hasta julio del corriente año se ha incrementado en un 225%, pasando de US$6,822 millones a US$22,186 millones.
Resalta que el crecimiento de la deuda interna fue de 742% en el mismo período, pasando de US$975 millones a US$8,207 millones. Por otro lado, la deuda externa creció un 139%, al incrementarse a US$13,978 millones de los US$5,847 millones que representaba en 2005.
Cuidado con el gasto
Rafael Fornet considera que como consecuencia de un mayor nivel de deuda, el gobierno debe dedicar cada año más recursos al pago de intereses de deuda externa e interna, así como también de comisiones, es por esto que en 2013 hasta julio se ha pagado un monto de RD$35,435 millones, lo cual representa un incremento de RD$8,341 millones ó 31%, con respecto a 2012, cuando el monto destinado al pago de intereses ascendió a RD$27,094 millones.
A su entender, una medida para verificar la sostenibilidad de la deuda es la proporción de intereses/ingresos tributarios, la cual se recomienda no debe ser superior al 15% de los ingresos.
Señala que un porcentaje superior indica una mayor probabilidad de default o cesación de pagos. En el caso de República Dominicana, dice, tomando los ingresos totales se muestra que en 2011 se llegó a 16.1% y en el 2012 esta relación alcanzaba 17.7%. “Es decir, en el 2012 el gobierno destinó el 17.7% de sus ingresos en el pago de intereses de la deuda”, sostiene.