Las autoridades de este Gobierno han puesto el foco hacia Pedernales. Lo que han hecho en materia de impulso del desarrollo turístico en esa provincia y de la región Sur, si se pasa balance a los últimos 20 años, posiblemente no tiene precedentes.
Es digno que se reconozca que el presidente Luis Abinader y el ministro de Turismo, David Collado, junto con la Dirección General de Alianza Público Privadas, se han encargado de poner esta parte del país en el mapa del interés de inversionistas locales y extranjeros.
Nunca como ahora se había mencionado tanto a Pedernales y al Sur en materia de inversiones a gran escala. Basta con recordar que a principios de este mes de febrero se inició la construcción de dos hoteles, los primeros, con una inversión conjunta que supera los US$240 millones, agregando más de 1,000 habitaciones.
Este es el monto de Pedernales. Ahora se nota un impulso combinado de los sectores público y privado que jamás se había sentido.
Ahora es que se está reconociendo, con hechos, el gran potencial que posee esta provincia y toda esta zona. Los atributos naturales, quizá únicos en República Dominicana, sobresalen ahora que el gran capital y las autoridades han demostrado que sí es posible desarrollar el turismo en Pedernales.
Y lo mejor del caso: podría ser un turismo diferenciador del destino tradicional que vende República Dominicana.
No sólo se trata de playas de arenas blancas, de las más bellas del país, sino también de paisajes únicos en el Caribe y una biodiversidad que establece una clara diferencia con lo que tradicionalmente había sido conocido el destino dominicano.
Con toda seguridad, Pedernales marcará un punto de inflexión en la historia del desarrollo turístico dominicano. Los paisajes y riqueza cultural de esa zona del país sobresalen por sobre las demás, sin dejar de reconocer los encantos que tiene cada provincia, cada playa, cada polo, cada dominicano.
El Estado, hay que reconocerlo, está haciendo lo suyo al ser el garante institucional y financiero de gran parte de este desarrollo que se ha iniciado en Pedernales y la región Sur. Recientemente, por ejemplo, Turismo y la Presidencia inauguraron la habilitación de playas, plazas de vendedores y accesos a playas en Barahona, lo que demuestra el interés y la decisión del Estado en desarrollar, de una vez y por todas, las provincias del Sur.
Y así debe ser. La única manera de sacar de la pobreza a miles de dominicanos residentes en esa provincia es ofreciéndoles la oportunidad de que se integren a la vida productiva, aportando para la economía del país y para el sustento de sus familias. Pedernales, ahora o…