La Unión Arrocera Dominicana (UAD) aclaró este jueves que no pretende desmeritar ni dejar de reconocer la importancia que representa el Tratado de Libre Comercio DR-CAFTA para el desarrollo económico y comercial de los países centroamericanos signatarios.
El vicepresidente ejecutivo y vocero de la UAD, Heraldo Suero, enfatizó que el sector arrocero nacional solo aboga por una solución a la amenaza que representa para la producción local las importaciones masivas libres de aranceles desde el territorio estadounidense a partir de enero del 2025, según se establece en este acuerdo, firmado por el país.
El dirigente empresarial afirmó que es necesario “el blindaje definitivo” de la producción nacional de arroz, y que eso se puede lograr a través de un entendimiento político al más alto nivel, al margen del tratado, para preservar su producción, así como la paz social y económica de los campos dominicanos y la soberanía alimentaria de la nación.
En ese sentido, Suero manifestó que la UAD confía en la buena voluntad, la visión estratégica y geopolítica de Estados Unidos como principal socio comercial de la República Dominicana, para que entienda el interés del país en salvaguardar el principal artículo de la canasta básica familiar.
Agregó que el país puede contar con que el sector arrocero nacional seguirá produciendo el grano a precios estables y asequibles, como lo ha venido haciendo en los últimos 15 años.
Agradeció al presidente Luis Abinader por el respaldo “decidido y contundente” a ese renglón productivo, reiterado públicamente en los días pasados, “a menos de 15 días de su favorable alocución en la rendición de cuentas en la Asamblea Nacional”.
Por último, reconoció que es más que evidente que el primer mandatario está preocupado y comprometido con el provenir, en especial en estos tiempos de incertidumbre y grandes retos financieros tanto a nivel nacional como internacional.
Cultivo y producción de arroz
Más de 30,000 productores de 21 provincias y 35 municipios se dedican al cultivo de arroz, siendo este rubro el principal motor de su economía local. Su siembra y el procesamiento del grano genera más de 80,000 empleos y cerca de 320,000 empleos directos.
En República Dominicana existen unas 300 agroindustrias o factorías del cereal y una cadena muy larga de otras empresas pequeñas, medianas y grandes que comercializan el producto.
El esfuerzo constante, la innovación tecnológica y la inversión de productores y del Estado han convertido el país en autosuficiente e incluso en exportador de excedentes de arroz. Esto, además de garantizar la seguridad alimentaria, ayuda a ahorrar divisas.
El volumen de la producción de arroz blanco se aproxima a los 14 millones de quintales al año.
El aporte monetario del sector arrocero supera los RD$32,000 millones al año. El país ahorra cerca de US$550 millones anuales en importaciones que tendría que hacer si quebrara la economía del arroz.