Con la camioneta cargada de pan recién horneado y listo para su distribución, Sandy Cadette Colón salió a trabajar como cada día, sin sospechar que su vida iba a cambiar para siempre. Un conductor ebrio se durmió al volante, salió de su carril, impactó un motorizado y se estrelló contra el vehículo que había dejado la panadería hacía 15 minutos.
El accidente fue mortal para el motociclista Emiliano Disla Elena, de 43 años, quien expiró horas más tarde producto de múltiples lesiones. “Solo vi cuando chocó al motorista y ya estaba encima de mi vehículo, todo fue muy rápido”, comenta Cadete Colón, mientras se regocija por estar vivo aunque con lesiones permanentes.
En 2019 un promedio de seis personas murieron cada día producto de los traumatismos acaecidos en accidentes de tránsito, unas 2,095 en total, según la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett), siendo el año de mayor registro de muertes en los últimos 10 años.
Disla Elena forma parte de las desafortunadas estadísticas que recogen unos 20,387 fallecidos en accidentes de tránsito, entre 2009 y 2019.
República Dominicana es el segundo país, de los 182 pertenecientes a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con más muertes en accidentes de tránsito por cada 100 mil habitantes, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Las muertes por accidentes de tránsito aumentaron un 47% en 2019 con relación a 2018, año en el cual la Digesett registró 1,418 fallecidos. Durante la década fallecieron 18,292 personas, el 87% del sexo masculino (16,036). Entre 2009 y 2018 ocurrieron 16,523 accidentes de tránsito.
La Oficina Nacional de Estadística (ONE) afirma en su informe “Accidente tránsito terrestre registrados que causaron muertes por año” que el 50% fue producto de choque o coalición (9,108), el 19% atropellamiento (3,473) y el 14% deslizamiento (2,625).
En el 64.2% de los 16,523 accidentes registrados durante la década se vio involucrado una motocicleta, para un total de 10,616.
En este período, el 2016 fue el año de mayor registro de accidentes de motocicletas, con un 11.9% (unos 1,804).
El 5.3% de los accidentes involucró carros (884), el 3% camionetas (414), el 2.1% camionetas (353), el 2% yipetas y jeep (386) y menos del 1% autobuses, minibus y bicicletas.
Provincias con tasa más alta
Santo Domingo lidera el ranking de las cinco provincias con más accidentes, con una tasa del 16%, unos 2,595 afectados durante el período analizado. Le siguen Santiago con un 8% (1,302 accidentes), San Cristóbal (1,213) y La Vega (1,220) ambas con 7%. En el Distrito Nacional se produjo el 5% (874).
Según la ONE, las provincias Pedernales y Elías Piña, ambas con baja población, fueron las de menor incidencia entre 2009 y 2018, ya que sólo registraron 46 y 67 accidentes de tránsito, respectivamente.
El informe “Estado de la seguridad vial en la Región de las Américas” de la OPS, explica que los Estados miembros de la ONU tienen el compromiso de reducir a la mitad el número de muertes y traumatismos mundiales por colisiones en la vía pública para 2020.
De acuerdo a los registros oficiales, República Dominicana logró reducir los accidentes de tránsito un 11% en 2018 en relación al 2017, al pasar de 1,465 a 1,295, una disminución absoluta de 170 muertes. En 2017 bajó un 18% en relación al 2016, al pasar de 1,804 a 1,465 muertes, una disminución absoluta de 339 defunciones.
En la región
El informe de las Naciones Unidas para la Seguridad Vial destaca que en la región, en 2016, las muertes por los accidentes de tránsito provocaron 154,997 defunciones, 1,283 más que en 2013; el 23% (unas 35,000) de las defunciones corresponde a motoristas.
“A nivel regional, las muertes causadas por el tránsito son la segunda causa principal de mortalidad en adultos jóvenes de 15 a 29 años de edad”, señala.
Cada año son miles los carros que se suman al parque vehicular, aumentando el tráfico en las calles y carreteras de República Dominicana. A mayor cantidad de vehículos, mayor es la probabilidad de que puedan colisionar unos con otros.
Los accidentes de tránsito que involucran vehículos de motor son equivalente al volumen del parque vehicular.
La Dirección General de Impuestos Internos (DGII) afirma que del total de vehículos de motor registrados a diciembre de 2018, un 55.1% son motocicletas. El 20.9% son automóviles, el 10.3% vehículos de carga y el 9.9% yipetas. El 3.7% restante se distribuye entre autobuses, máquinas pesadas, volteos y otros.
De acuerdo a la DGII, el 35.9% de los automóviles está registrado en el Distrito Nacional, el 23.6% en Santo Domingo y el 11.1% en Santiago.
El presidente de la Cámara Dominicana de Aseguradores y Reaseguradores (Cadoar), Miguel Villamán, atribuye el crecimiento del parque vehicular a las facilidades crediticias que ofrecen los bancos para la adquisición de nuevas unidades.
“Es un negocio que da mucho volumen, pero es muy siniestrado. Somos unos de los países con más alto nivel de muertes por accidentes, por lo que nosotros los aseguradores estamos tratando de crear conciencia en los clientes de cómo conducir”, dice Villamán.
“Un asegurado que haya tenido muchos accidentes, el seguro le recarga la prima, en ocasiones quieren moverse de compañía, pero la cámara de aseguradores tiene esa información y se le facilita a la nueva aseguradora” ,añade.
Leyes
Como forma de reducir los accidentes, en 2017 el Congreso Nacional aprobó la Ley 63-17 de Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, que por primera vez reglamentó la conducción bajo los efectos del alcohol y de sustancias controladas.
También en 2019 se aprobaron seis reglamentos elaborados por el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant). Las normas establecen los requisitos mínimos para que un vehículo de motor pueda transitar, mejorar la formación de los conductores, identificar y sancionar a los conductores que comentan infracciones.
Relato de accidente
Tras el choque en el puente Presidente Peynado (Puente de Villa Mella), el panadero Sandy Cadette Colón fue trasladado por el Servicio de Emergencia del 911 al hospital Ney Arias Lora, donde también fue llevada la persona que lo atropelló, quien según describió era una persona caucásica de unos 50 años.
Con las suturas frescas, producto de varias cirugías, se desplazó a la Fiscalía de Tránsito de la Procuraduría General de la República (PGR) a consultar su caso, donde le informaron que debía terminar todo el proceso médico, para saber si quedaría con lesiones permanentes. Ahí encontró algo que no concordaba con las características de la persona que provocó el accidente.
El acta sobre el accidente de tránsito de la antigua Autoridad Metropolitana de Transporte, ahora Digesett, registra el nombre Jacobo Villa, de 25 años, como la persona con la que sus abogados no han podido contactar, dejando su caso en un limbo jurídico. Mientras padece una discapacidad motriz permanente.
A más de cinco años de aquel fatídico 15 de febrero, Sandy Cadette Colón recuerda los meses que tuvo que permanecer en cama en los hospitales, las ochos cirugías y los casi tres años de visitas constantes al consultorio de un ortopeda.