El tamaño del mercado influye mucho para que las aseguradoras se atrevan a incursionar en ciertos servicios y productos para los clientes. Y mas cuando estamos en una sociedad con tantas limitaciones y desigualdad. Para lograr diseñar productos asequibles a los de menores ingresos, que son la gran mayoría, debería tener primas muy bajas, que solo es posible cuando la población es grande, y podemos jugar con los volúmenes y precios, por una regla universal que a mayor volumen menores costos.
Ahora bien, es una oportunidad que no estamos aprovechando. Tenemos una gran franja de la población necesitada de seguros, que no tiene acceso, no solo porque no tenga los recursos para adquirirlo, también porque no tiene la facilidad y los conocimientos para saber lo que le conviene y como. Y es donde las aseguradoras deben trabajar. Y si lograsen alguna unidad de propósito, incluyendo las autoridades de gobierno, podrían lograr avanzar en este sentido.
Tenemos un buen mercado, que, a pesar de no tener una buena supervisión, se ha mantenido sano y cumpliendo con sus obligaciones, salvo algunas excepciones, Lo que nos ofrece la capacidad de incursionar en el mercado, diseñando productos individuales para los riesgos de personas, salud y vida, pero también para los bienes materiales, vehículos, mobiliarios, equipos y viviendas para cubrir los riesgos de las MiPymes y pequeños negocios, con primas económicas y de simple evaluación y ajuste.
Una idea que siempre he querido impulsar, son los seguros a través de asociaciones, cooperativas, financieras etc. Pero sin que estas instituciones quieran participar como comisionistas, mas que facilitadoras, que es donde se encarecen las coberturas y complican el abordaje y mantenimiento de las pólizas. Todos quieren ganar y no es posible para desarrollar conciencia y mercado.
Es preciso que el mercado tengo apetito, y cree la formula de llegarle a todos los prospectos, porque mientras mas grande es el mercado, podemos tener primas más equitativas. El mejor ejemplo es el mercado de vehículo, donde mas de 2 millones de motocicletas no tienen seguros de ninguna clase, y producen mas del 60% de los accidentes, lo mismo que un 40% de los demás vehículos. Pues cuando todos paguen primas, tendremos un mayor volumen, con casi la misma cantidad de siniestro indemnizable.
Le vendría bien también a la economía. Los seguros deben hacer reservas, y emplear personas para atender sus obligaciones y cumplir con la ley. Pero esas reservas sirvan para que tengamos más recursos para palanquear otros negocios, y los accidentes tendrían pago de las indemnizaciones, evitando que algunos hogares vayan a la pobreza por no tener los recursos de cubrir sus necesidades agudizada por lesiones o pérdidas de bienes.
Nuestras aseguradoras deben ser más proactivas, y deseñar soluciones para influenciar a todos los niveles la necesidad de protegerse mediante los seguros. Pero debe ser una tarea de aseguradores, corredores y autoridades. Cada vez los riesgos son mayores y frecuentes, y ofrecer soluciones es una responsabilidad de las aseguradoras. Esa es su razón de ser su esencia. Manos a la obra.